Lo que debió ser una charla informativa sobre el Protocolo de Prevención, Atención y Sanción a la Violencia de Género, Discriminación, Acoso y Abuso Sexual a cargo de la Dra. María Minerva Zapata Denis se convirtió en una confrontación abierta con los alumnos asistentes, quienes se quejaron de no encontrar respuestas sobre los problemas de acoso que sufren en los campus de la universidad.
La Dra. Zapata Denis, en su calidad de secretaria técnica de la Comisión Ejecutiva de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) para la Prevención, Atención y Sanción de la Violencia de Género, Discriminación, Hostigamiento, Acoso y Abuso Sexuales fue invitada para dar una conferencia sobre el funcionamiento de los protocolos a los alumnos de la Facultad de Educación; sin embargo, al referirse al proceso que siguen las denuncias, hubo una avalancha de cuestionamientos de los alumnos.
“Para que procedan las denuncias en la universidad se tienen que ser de manera personal, tienen que ser interpuestas en los primeros 30 días ocurrido el hecho y si se denuncia a un docente o trabajador se tiene que esperar 30 días para su investigación; es el tiempo que marca el contrato colectivo”, dijo.
Alzan la voz
Ante su comentario, alumnas y alumnos del plantel alzaron la voz para manifestar que ese protocolo era obsoleto, burocrático, lento, amañado y que las denuncias deberían ser anónimas.
La Dra. Zapata Denis dijo que la persona agredida tendría, primero, que depositar una hojacon su nombre en el buzón de prevención, para que en 10 días la comisión ejecutiva la citara en su facultad o en algún módulo de psicología para que presentara su declaración junto con sus pruebas; con base en ello se considera si se llama a entrevista a la persona agresora para que con pruebas se pueda defender; entonces la comisión ejecutiva decidirá si se da una sanción o no.
Un alumno le pidió que opinara sobre la protesta de estudiantes de la Facultad de Medicina el pasado 6 de marzo, quienes utilizaron pancartas para expresar las situaciones de acoso y agresión que viven dentro de su facultad; la funcionaria dijo no estar enterada de la situación.
Otro alumno la cuestionó sobre el “tendedero de denuncias” que fue colgado en la Facultad de Derecho, donde varias mujeres denunciaron situaciones de acoso por parte de docentes, alumnos y trabajadores; la funcionaria dijo que tampoco estaba enterada.
Abrir los ojos
–¿Está usted segura que no está enterada? ¿No usted labora en esa facultad y no se enteró? Yo soy de otra facultad y me enteré. ¿No será que la UADY y usted no quieren abrir los ojos?, le preguntó el alumno.
En ese momento una docente que se encontraba en el lugar trató de calmar los ánimos, pero poco pudo hacer.
Por último, otra alumna cuestionó a la ponente sobre si no le llamaba la atención todos estos sucesos que ocurrían en la facultad; la doctora contestó que se debería trabajar en un proyecto de sensibilización y talleres para todos los que integran la universidad, pero de los cuestionamientos ya no contestó más y prosiguió con su charla.
Al no haber respuestas a sus cuestionamientos, los alumnos, en son de protesta, fueron abandonando paulatinamente el auditorio de la facultad decepcionados porque su universidad no los respalda ni los escucha.
(Texto y fotos: Melly Manzanero)