Miles de trabajadores de la industria de la construcción están pasando una de sus peores crisis a raíz de la suspensión de la obra pública y privada dispuesta por las autoridades municipales y estatales por la contingencia sanitaria por el Covid-19, informó ayer Bernabé Chan Castañeda, secretario general del Sindicato de Alarifes del Estado de Yucatán de la CTM.
Las obras civiles se han detenido y muchos obreros no cuentan con ingresos para poder solventar sus gastos.
–Los alarifes regresaron a sus hogares luego de que las autoridades dieron la orden de que se suspendieran las obras, a fin de que la gente permanezca en casa; sin embargo, muchos pasan necesidades por falta de ingresos, comentó el secretario general.
–Algunos obreros están buscando algún trabajo, ya sea a lado de casa, con los vecinos o algo que hacer para poder tener algo de dinero. La mayoría de los obreros de la construcción no tienen a quién recurrir para apoyarse y solventar sus problemas económicos, añadió.
Chan Castañeda mencionó que quienes trabajan en la industria de la construcción, por tratarse de un empleo temporal, no reciben un pago fijo por parte del sector patronal.
–Es un problema que los trabajadores de la construcción siempre tienen, no tienen el mismo trato que tienen los trabajadores de planta o los eventuales; al momento que se les retira, dejan de percibir dinero y es por eso que la gente busca cómo solventar esa situación ya no es un día, dos o tres sino que son cuatro semanas más de inactividad, remató Chan Castañeda.
(José Manrique)