TIZIMIN, Yucatán, 26 de abril.- Una difícil situación están atravesando los vendedores ambulantes ante esta contingencia por el Covid-19; tal es el caso del señor Rubén Salvador Tuz Valle, conocido granizadero en la Ciudad de Reyes que es apodado “Don Bigotes”, quien tiene que recorrer las calles de la urbe para tratar de vender sus raspados y, de esta manera, solventarse económicamente para los gastos en el hogar.
En entrevista para este medio de comunicación, señaló que sus ventas decayeron más de un 50 % en esta contingencia, y para poder sacar aunque sea para los gastos para la comida, tiene que recorrer las calles de la ciudad para tratar de vender. “Antes acudía a escuelas y el Polifuncional, que eran mis puntos estratégicos donde se tenían buenas ventas por los alumnos de los colegios y entrenamientos en la unidad deportiva, pero por la contingencia toda actividad se paralizó, también nuestra economía. Esta enfermedad solamente está trayendo más crisis y, cuando pase, los ciudadanos estaremos peor, ahora la ganancia que logre sacar es una bendición”.
Agregó que esta afectación es pareja para todo el comercio y el ambulantaje, “los que estamos dedicados a vender productos a base de hielo también estamos pereciendo en esta crítica situación, porque a pesar de que el clima caluroso se preste, la gente no compra porque no tiene trabajo y, por lo consiguiente, dinero”.
“Don Bigotes” platicó que él continúa vendiendo respetando las medidas correspondientes, como es el uso cubre-bocas y el lavado y aplicación de gel en las manos para evitar el contagio de esta terrible enfermedad.
(Raquel Margarita Huerta)