El diputado Manuel Díaz Suárez (PAN), presidente de la Comisión de Salud del Congreso del Estado, consideró acertada la decisión del Ayuntamiento de Dzoncauich de no regresar a la “nueva normalidad” a pesar de no tener casos confirmados de COVID-19, pues habría sido un riesgo, además de que hay que hacer el último esfuerzo en esta recta final del mayor pico de contagios.
El legislador dijo que ha tenido oportunidad de charlar con profesionales de la salud, epidemiólogos, infectólogos y demás, quienes tienen cierta preocupación porque no disminuye el número de contagios y de fallecidos.
Sin embargo, dijo que lo que se espera es que la tendencia baje en la Entidad, aunque no se sabe cuánto tiempo nos mantendremos en la fase crítica.
Además, expuso que el COVID-19 presenta un comportamiento atípico porque los enfermos muestran síntomas que van más allá de lo respiratorio, como problemas gastrointestinales y otros, sobre todo en niños, parecidos a la meningitis; en general todavía hay mucho que se debe saber del virus, dijo.
“Mucha gente piensa que porque estamos en el punto más alto de contagios ya empezará a bajar y que se pueden relajar las medidas, pero no es así, porque nos podríamos mantener un largo tiempo en ese pico, por lo que no hay que bajar la guardia”.
Aguantar un poco más
“Hay que aguantar un poco más, hay que hacer un esfuerzo y mantener las medidas. En este sentido creo que la decisión tomada por Dzoncauich es correcta, porque como los demás municipios debe hacer un esfuerzo mayor, aunque sea el único municipio de la Entidad donde no se han confirmado casos positivos”, dijo.
Señaló que de haberse integrado a la “nueva normalidad”, se hubiera puesto en riesgo a la población. Lo anterior, porque se relajarían las medidas y la población podría salir, viajar e ir a otros municipios que sí presentan contagios y ahí vendría el riesgo.
Dijo que se tomó la decisión correcta, sobre todo ante un virus que se comporta de manera errática.
Ultimo esfuerzo
“Ya falta poco y no hay que bajar la guardia. Sabemos que la situación es desesperante, que es difícil quedarse en casa y más aún cuando no hay trabajo o escasea el ingreso, pero la población ya aguantó varios días, semanas, y ahora hay que dar el último esfuerzo”, reiteró.
Apuntó, sin embargo, que cuando se reanuden las actividades y empiece a bajar la curva de contagios, no será nada igual que antes, por lo que se deberán mantener por un buen tiempo las medidas de prevención como el cubrebocas, el uso de gel antibacterial, además de que los negocios deberán mantener ciertas restricciones, entre otras.
(David Rico)