En opinión de expertos que siguen la evolución de la pandemia de COVID-19, el panorama todavía es incierto para pronosticar qué pasará en las próximas semanas o meses, e incluso si los yucatecos podrán salir pronto de sus casas.
Yucatán se mantiene todavía en el punto más alto de contagios: hasta el domingo había 151 fallecidos y 1,500 casos positivos; la tasa de contagio de Yucatán es de 47.8 por cada 100 mil habitantes.
La incógnita es cuánto tiempo se mantendrá la Entidad en el pico de la pandemia, que es de lo que dependen las condiciones de un posible regreso a la normalidad.
De acuerdo con lo anterior, Yucatán se mantiene en “semáforo rojo” y a partir del 1 de junio no habrá “nueva normalidad”, únicamente se permitirán las actividades laborales esenciales, a las que se sumaría las labores de construcción.
Fin a Ley Seca
Se espera que se reanuden actividades como las de la industria cervecera, por ejemplo, que ya ha anunciado que lo hará a nivel nacional, lo cual se conjugará con el levantamiento de la Ley Seca que ya se anunció para el 1 de junio.
No obstante, en la Entidad se mantendrán las medidas estrictas de sana distancia, uso obligatorio del cubrebocas, lavado frecuente de manos y uso de gel antibacterial; podrán operar los centros laborales esenciales y los arriba mencionados, pero los espacios públicos y privados continuarán cerrados y no habrá clases presenciales en lo que resta del presente ciclo escolar.
De igual forma, las personas vulnerables no deberán salir de sus casas hasta que haya una disminución en la curva de contagios.
En la lógica de recuperación, la Entidad debería transitar del “semáforo rojo” al “semáforo naranja”, pero para ello podrían pasar varias semanas, pues no se sabe en qué momento bajará la curva de contagio, para lo cual es indispensable la participación de la gente.
Semáforo naranja
Cuando ya estemos en color naranja, se sumarían a la reactivación actividades no esenciales a un nivel reducido, así como en el espacio público también de manera reducida, en tanto que la población vulnerable podrá volver al trabajo.
Sin embargo, de acuerdo con expertos, es aventurado señalar en qué momento ocurrirá eso y, al menos por ahora, es difícil pensar que la gente pueda salir a pasear, visitar playas o demás centros turísticos, una vez que entre el período de vacaciones de verano.
De acuerdo con el calendario escolar las vacaciones de verano arrancan formalmente el 6 de julio, para lo cual falta un mes y algunos días, pero dada la magnitud de la pandemia se ve difícil, para algunos imposible, hablar de que para estas fechas se podrían regresar a la normalidad, pues es probable que se mantengan todavía medidas estrictas de distanciamiento social.
Una vez que se transite del color naranja al amarillo se quitarían ya restricciones en actividades no esenciales, pero se mantendrán medidas menores en los espacios abiertos, se reabrirán espacios cerrados como restaurantes, museos y otros.
Sector turismo
El sector turismo ha sido uno de los más golpeados en esta pandemia, al grado de que algunos actores del mismo han manifestado que se encuentra en bancarrota y, a nivel nacional, el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) ha mencionado que en lo que va del año la caída del sector ha tenido una pérdida de 1.6 billones de pesos.
El Consejo Empresarial Turístico (Cetur) en la Entidad ha solicitado que las empresas del sector puedan reanudar labores productivas el próximo 1 de junio, en la modalidad gradual que los protocolos indiquen.
Sin embargo, hasta ahora no hay nada claro al respecto y sólo el ritmo de la pandemia determinará lo que sucederá en las próximas fechas.
(David Rico)