Explica un especialista
Si no tomamos en cuenta las recomendaciones de las autoridades de salud, cuando se aplane la curva del COVID-19 puede haber un rebrote e incluso puede quedarse durante años, como el dengue.
Eso advirtió ayer el reconocido maestro universitario especialista en Salud Pública, Dr. Rubén Cámara Vallejos, y explicó:
–El COVID-19 es una pandemia que nos llega a México no en un momento regular, sino en un momento crítico en que se está reconstruyendo el sistema nacional de salud.
Esa es la situación que hay que tomar en cuenta: que el COVID nos cayó en un momento en el que hay una reconstrucción o reconfiguración del sistema nacional de salud que obedece al hecho de que el actual Gobierno Federal se encontró con un sistema de salud prácticamente desmantelado, con unidades médicas que si bien estaban operando no tenían los recursos humanos y el equipamiento suficientes, y con más de 300 unidades de salud que en todo el territorio nacional estaban inconclusas y abandonadas.
Cuatro abandonadas
De hecho, en Yucatán estaban 4 abandonadas, dos de ellas en el Sur del Estado: Peto y Tekax, de regular importancia. No estamos hablando de unidades médicas pequeñitas, sino de unidades que pueden atender a pacientes de segundo y tercer nivel. Una ya la vino a inaugurar López Obrador en el Sur del Estado, la de Ticul. Y en todo el territorio nacional hay más de 300 que no se concluyeron y, además, se abandonaron.
–¿Por qué pasó todo esto, doctor?
–Esto pasó porque lo que interesaba era nada más el inicio de las obras, dar la concesión de la construcción y el manejo de los recursos a ciertas empresas, a ciertas compañías amigas de los gobernantes en turno. Y mucho del dinero presupuestado se agotó e incluso requirieron más recursos y aún así no se concluyeron.
Entonces teníamos un sistema de salud completamente ineficiente que ya con los padecimientos habituales no se daba abasto.
Demanda superaba la oferta
–Dr. Rubén, en Yucatán hasta hoy no se dan abasto los hospitales de la SSY. Tienen a los pacientes sentados con sus botellas de suero a veces durante días esperando que les den una cama.
–Es que, como en todo el país, la demanda superaba la oferta de los servicios sobre todo en el área quirúrgica donde eran continuamente reprogramadas las operaciones, y las mismas consultas de especialidad.
Esto como antecedente, y es cuando nos cae esta pandemia del COVID que, como te comentaba, es inédita, porque es una enfermedad que si bien hay otras similares provenientes de virus del mismo tipo, no obstante éste en particular del COVID-19, SARS-CoV- 2, es el virus que lo produce, era un virus desconocido hasta entonces, no se sabía de su presencia en seres humanos. Se dice que puede proceder de China, pero no hay evidencia todavía.
Zoonosis
Y se asocia a una variedad de murciélago. En China consumen animales exóticos como el pangolín, que tiene escamas como el armadillo. La teoría es que del murciélago pasa al pangolín y de éste al ser humano.
Entonces se detectan los primeros casos en China y se empieza a observar que su contagio es muy fácil, además la transmisión es geométrica. El hecho de que haya un enfermo no significa que contagie a una sola persona adicional, sino que puede contagiar incluso a 8, 10 ó 12 personas según su dinámica, su desplazamiento, y esas 8, 10 ó 12 personas hacen lo mismo.
El COVID tiene otra variante en la que puede haber casos asintomáticos, que uno tenga la enfermedad y la transmita, pero no tenga manifestaciones clínicas. Y también puede ser que las manifestaciones sean muy leves y sean casos de COVID que prácticamente no les afectan, pero contagian a otros. Entonces esto hace que se multiplique de forma muy rápida. Puede ser que pasen de 4 a 15 días para que se manifieste desde que tienes el contacto con una persona infectada. Es variable.
Manifestaciones de la enfermedad
–¿Cuáles son las manifestaciones?
–Mucha fiebre, mucho dolor de cabeza, secreción nasal, puede haber tos, manifestaciones clínicas similares a otras patologías, pero si no se hace un diagnóstico de COVID continúa contagiando.
–¿Cuánto puede tardar un paciente en salir curado?
–Hay pacientes que tardan hasta 3 meses hospitalizados. La evolución no es igual. Puede ponerse el paciente grave de un día para otro: entrar al hospital sin manifestaciones graves y morir al otro día.
–¿Y si lo intuban con un ventilador se salva?
–El intubamiento no es garantía de que sobreviva. En un momento dado le puede ayudar a no llevarla tan mal, de hecho una buena parte de los intubados fallece.
Los mandan a su casa y salen a trabajar
–Dicen que muchos a los que el hospital manda a su casa a descansar siguen saliendo y eso esparce más la enfermedad.
–No hay que olvidar que México es un país que se caracteriza porque una buena parte de la población trabaja en la economía informal, es un porcentaje elevadísimo. Es gente que vive al día. Sale y se pone a vender. Y los que no están en eso trabajan por contratos y no tienen ningún aseguramiento. Como los del “outsourcing” que sirven a otras empresas sin ninguna prestación. Una buena parte de los mexicanos están en esa condición. Cuando tú mandas a su casa a los mexicanos que están en esa situación los estás mandando en una situación de desventaja y lo menos que les va a preocupar es quedarse en su casa, si no van a salir a buscar dinero para comer, pues aún cuando hay apoyos gubernamentales no son suficientes, tanto por el monto que les otorgan como porque tampoco les llegan a todos los sectores de la población.
–Doctor, me dicen que en los pueblos hay gente que no usa cubrebocas porque no todos tienen dinero para comprarse uno. ¿Se pueden reutilizar?
–Sí. Si se cuelga en el sol se puede reutilizar el cubrebocas varias veces. Además, uno lo puede hacer en su casa con cualquier tela que tenga.
La desinformación
Continúa el Dr. Rubén:
–La gente se desespera porque hay otra situación importante que tiene que ver con la situación coyuntural política: que la mayor parte de los medios de información, no todos porque hay medios serios como el POR ESTO!, se han dedicado a desorientar a la gente. Y la misma gente incluso a veces lo hace, porque cualquiera manda mensajes de su opinión personal, y lo que van generando es una situación de caos. Así que por una parte están los extremos: la gente que se desorienta y tiene mucho miedo, pánico, y empieza a adoptar actitudes de rechazo hacia sus vecinos, sobre todo en las comunidades rurales, donde cierran los accesos a las poblaciones, amenazan con sacar de la población a los que creen que están enfermos, y también están los que no le temen al COVID, incluso hay quienes dicen que no existe y que es un invento del gobierno con otra finalidad y así todo se vuelve un caos.
Infodemia, la otra pandemia
–Dr. Rubén, también hay muchos políticos metidos a hacer acusaciones contra la forma en que se manejan las medidas contra la pandemia y, aunque no saben nada, hablan como si fueran grandes doctores.
–Esos son los políticos perversos que con el fin de sacar ventaja política también generan desinformación o sub-información que llega a través de ciertos medios de comunicación o de redes sociales. Esos políticos perversos lo que tratan de hacer es desacreditar al gobierno, independientemente del partido que sea, porque se da contra el Presidente y contra los gobernadores. Hay una manipulación política de la emergencia sanitaria.
Entonces la gente ya no sabe a quién creerle. Si al alcalde, al padre, a López-Gatell o al vecino, o al Gobernador. Por eso se habla de la infodemia, que es la pandemia de la desinformación.
Entonces todo lo que estamos viviendo se da en ese contexto. Pero hay otro aspecto fundamental: el económico, vinculado al sector productivo. La actividad productiva del país se ha detenido, hay una baja importante del PIB, y los más desesperados para que se restablezca la actividad económica son los del sector empresarial. Los que presionan para que se dé esta nueva normalidad son los del sector productivo, porque están viendo afectados sus intereses. Y es cuando la situación se complica aún más para la toma de decisiones a nivel gubernamental.
Pero es un hecho que no puedes mantener en cuarentena durante muchos meses a la gente. Porque la cuarentena afecta, la gente que no está trabajando sale afectada porque la actividad productiva está detenida. Por eso ya se está hablando del retorno a la nueva normalidad. No tenemos por qué estar tanto tiempo en cuarentena.
Se incrementaron los suicidios
–Yo creo que la que ya padecimos es necesario salir de ella. Hay gente que está desesperada. El número de suicidios se ha incrementado durante la pandemia. Y la prensa nacional dice que en México se han querido tirar a las líneas del Metro, porque la gente no sabe qué hacer para darle de comer a su familia.
–¿Aquí en Yucatán se decretó la Ley Seca, pero se han multiplicado muchos problemas, qué aspectos contraproducentes tiene la Ley Seca?
–Yucatán es uno de los Estados más consumidores de alcohol. La afición al alcohol es una de las más grandes, Los privas de alcohol vas a ver muchos síndromes de abstinencia, que pueden pasar por depresión, convulsiones, violencia. Compran aguardiente adulterado, que muchas veces lo adulteran con el alcohol de farmacia que sirve para curación y que no se debe ingerir, puede dañar el hígado, dejar ciego, causar daños al sistema nervioso central y la muerte.
El alcoholismo siempre ha existido y la demanda está superando la oferta, entonces los proveedores viendo cómo lo adulteran para surtirlo. Puede haber mucha gente más que esté dañada a nivel hepático, a nivel de los riñones, pueden perder la vista porque hay lesión del nervio óptico. Varios que murieron perdieron la vista.
Campaña de educación
–¿Qué le faltó a esa medida de la Ley Seca? Porque yo no he visto ninguna campaña de salud mental contra el alcoholismo.
–Se debió acompañar de una campaña importante de educación. Hay diferentes niveles sociales y culturales, y hay que tomar en cuenta las características étnicas culturales de la población rural, incluso en lengua maya.
–¿Qué sigue?
–Aquí lo importante es que si se va a restablecer la actividad económica el próximo mes, hay que tomar en cuenta que no se debe dejar pasar el virus a los centros laborales ni a los centros escolares. Eso significa que se implementen protocolos sanitarios que se apliquen con rigor, pero respetando siempre los derechos humanos, cuidando la confidencialidad incluso en casos sospechosos o positivos. Que no pase el virus es algo que no se va a lograr, va a entrar. Pero lo importante es el protocolo de ingreso.
Y al interior también en las escuelas, que todos tengan que tomar en cuenta los protocolos para conducirse de manera adecuada. Se filtró el virus, tomar las medidas correspondientes, seguir respetando la distancia. En los talleres igual. Si antes en un taller trabajaban 100 personas, van a tener que ser menos, porque tienen que respetar la sana distancia de un metro y medio o dos. Y hay que poner servicios sanitarios adicionales, lavamanos adicionales afuera, lo más prudente es que cada quien lleve su alimento.
Puede haber un rebrote
–¿Puede haber un rebrote?
–Sí puede haber un rebrote, porque aún cuando la curva se aplane van a seguir habiendo positivos, la gente sale, el hecho de que salga no quiere decir que deje de estar expuesta, sobre todo los que no lo han contraído. Si esos se exponen a un positivo asintomático se contagian, y eso posibilita el rebrote. Por eso hay que estar apegándonos siempre a los protocolos.
Y hay que difundir la importancia de las medidas preventivas que contrarresten la desinformación y la contra-información que la gente tiene.
La mejor manera de prevenir las enfermedades es la educación, no hay más. Se tiene que hacer, porque la ignorancia conduce a cometer error tras error.
Campañas masivas
–¿Qué recomienda?
–Campañas masivas que impacten verdaderamente a la población, y hay que tomar en cuenta que la sociedad es plural, diversa, tomar en cuenta las variables técnico-culturales de la población, y campañas que estén sustentadas en enfoques psicológicos apropiados, la pedagogía que no es otra cosa que la psicología aplicada a la educación. Y enfatizarle a la gente que tenemos que hacerle caso a los medios oficiales o institucionales.
A la Secretaría de Salud nacional y a las Secretarías de Salud de los gobiernos estatales, que son las instancias autorizadas para el manejo de la información. Ellos son los que tienen la responsabilidad política, administrativa y moral para informar de manera oportuna y veraz a la población. Y todos los ciudadanos tenemos que apegarnos a las indicaciones que nos den las autoridades sanitarias, porque de otro modo vamos a convivir con el COVID no dos meses más, sino incluso años. El COVID podría volverse enfermedad endémica, que cuando llega se queda como el dengue, que llegó y se quedó. Y disminuyen los casos, se logra aplanar la curva, pero hay rebrotes porque se queda el virus.
Esperemos que no suceda eso con el COVID, pero la responsabilidad no sólo debe ser de las autoridades, sino también la población tiene que hacer su parte: el sector productivo, las universidades, la familia, el clero, todos tienen que involucrarse para erradicar de raíz este problema.
El gran desafío
–¿Lograremos recuperar la producción a pesar de la pandemia?
–Ese es el gran desafío: ¿cómo equilibrar la producción con la pandemia? Hay respuestas, pero tenemos que participar todos. Sí se puede, si todos nos comprometemos, y hacemos con responsabilidad y profesionalismo y entrega lo que nos corresponde, y con base en lo que las autoridades nos digan. Y si así lo hacemos, quedaremos “libres” y estaremos festejando la próxima Navidad como de costumbre, como ya es tradición.
(Roberto López Méndez)