Un total de 22 voluntarios con hasta tres años de servicio en el Hospital de Valladolid denunciaron discriminación y engaños de las autoridades de salud al no ser tomados en cuenta en la contratación de nuevo personal que realiza la dependencia estatal.
Los inconformes manifestaron que no es justo que luego de tanto tiempo de prestar sus servicios sin devengar un solo peso y creyendo en la promesa de que tan pronto surgieran vacantes ellos iban a ser tomados en cuenta, resulta que ahora no figuraron entre las 30 personas que fueron contratadas.
Además puntualizaron que los voluntarios no son gente improvisada, ya que cuentan con preparación académica para ocupar los perfiles que se requieren en la institución de salud, de tal manera que hay enfermeras y enfermeros generales, así como licenciados en enfermería.
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Asimismo, entre los voluntarios en servicios generales que llevan más de un año laborando sin ganar un solo peso, pero confiados en los compromisos establecidos de que serían contratados, están personas con preparatoria y secundaria.
Los denunciantes expusieron que grande fue su sorpresa cuando se enteraron que los 30 nuevos trabajadores contratados desde el pasado primero de mayo son gente ajena a Valladolid e incluso no viven ni siquiera en la zona.
Expusieron que todo parece indicar que son incondicionales de las autoridades y recomendados, lo que consideraron algo totalmente injusto porque los voluntarios han puesto su mejor esfuerzo y hecho sacrificios por hasta tres años.
Los voluntarios que han prestado sus servicios en el Hospital de Valladolid lo han hecho como enfermeros y camilleros sin ganar un peso y ahora no los tomaron en cuenta.
Piden intervención de autoridades y sindicato
–No es justo que en el hospital haya gente voluntaria con tanto tiempo de regalar sus servicios como enfermeros y camilleros y ahora hayan colocado en los puestos requeridos a recomendados dejándonos a nosotros sin oportunidades, señalaron en un escrito.
Pidieron la intervención de Josefina Miz, jefa estatal de Enfermería y del Secretario de Salud del Gobierno del Estado, Mauricio Sauri Vivas.
Explicaron que la opción de servicio voluntario funciona desde hace muchos años mediante la cobertura del personal faltante en calidad de méritos para ser contratado cuando se dispongan de las plazas, para lo cual se firma una carta responsiva ante la institución, lo que no fue respetada en esta ocasión.
Indicaron que el problema ya se planteó a la directora del hospital, Lorena Barradas, y a la jefa de Enfermeras, Norma Fernández, pero prácticamente se lavaron las manos con el argumento de que “el Estado tiene la última palabra”.
Pidieron asimismo la intervención del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud que encabeza el Dr. Eulogio Piña Briceño.
(Rafael Mis Cobá)