Todos los días, Alfredo García Jiménez y Ricardo Cortés recorren con su música diversos fraccionamientos de la ciudad para llevar alegría a las familias yucatecas que se encuentran en cuarentena por la pandemia y también para conseguir algún ingreso para sostenerse.
Estos humildes jóvenes han buscado un empleo formal, pero por la difícil situación económica provocada por el COVID-19 no han encontrado ninguno; entonces tuvieron la idea de hacer lo que más les gusta:tocar.
“Realmente esto ya lo veníamos haciendo en los camiones, en restaurantes, en eventos, pero con la enfermedad del coronavirus ya no pudimos seguir y surgió la idea porque yo busqué un empleo, pero no lo encontré y tengo que aportar para ayudar a mi mamá; entonces me junto con mi amigo Ricardo y salimos a las calles desde hace tres semanas; la gente nos apoya,coopera, a veces nos dan despensa, comida y así”, dijo Alfredo.
Su afición a la música lo motivó a aprender a tocar la zampoña y la quena, instrumentos que le han dado felicidad,libertad y con los que se ha podido expresarse.
“Yo soy músico lírico desde hace seis años y como músico urbano llevo como cinco años; desde que tenía 13años me gustaba la música y lo hacía por hobby, pero conforme va pasando el tiempo vas teniendo responsabilidades y tienes que salir a ganarte la vida; en lugar de estar en casa con video juegos o el celular, la música es algo que nos llena el alma, el espíritu; cada vez que interpreto una canción me siento en paz conmigo mismo, a pesar de las preocupaciones por la pandemia, que si el recibo de la luz, del agua, la renta, de todo eso; aún así disfruto mi música yes lo que pretendemos, que las familias que están en casita se olviden un poco de sus preocupaciones; queremos que las familias sean felices”, añadió.
Respeto a medidas por su parte, Ricardo dijo que es una satisfacción llevarle alegría a la gente, sobre todo en estos momentos tan difíciles por los que están pasando las familias; él también tiene necesidades,tiene esposa y tres hijos que sostener; sale a las calles a ganarse la vida,siempre respetando las indicaciones de usar cubrebocas, mascarilla y gel antibacterial.
“Yo siento padre llevar mi música a la gente y decirles que tarde o temprano esto de la enfermedad va a terminar, que no es para toda la vida, y eso se lo transmitimos tocando nuestra música que sé que les llega al corazón porque tocamos de todo, y a cambio nos regalan unas monedas porque también yo soy padre de familia, tengo tres hijos que sostener; yo tenía un trabajo, pero me despidieron ahora con la pandemia y mis hijos ya vana regresar a clases y son más gastos; por eso tomamos la decisión de salir a la calle: o te mueres por la pandemia o te mueres de hambre, y a mis hijos no les puedes decir que no hay dinero, ellos tienen hambre y hay que llevarles de comer sea como sea, pero también nos cuidamos, traemos cubrebocas, mascarillas,gel, todo”, nos dice.Como siempre, las familias yucatecas se solidarizan con los más necesitados y muchos salen de sus casas al escuchar las melodías que estos jóvenes interpretan en los fraccionamientos de Ciudad Caucel, como “Imagina”de John Lennon, “Perfume de gardenias” y otras más.
Por José Luis Díaz Pérez