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El acto de fe y gratitud que año con año se lleva a cabo se limitó a que desde sus hogares los feligreses siguieran el acto / Siguiendo las medidas sanitarias se realizó una procesión con la venerada efigie

TEKIT, Yucatán, 13 de junio.- Con una solemne misa a puerta cerrada y la procesión de la efigie de San Antonio de Padua por toda la comunidad a bordo de una camioneta, se celebró de forma significativa la fiesta litúrgica del patrono del pueblo.

En este tiempo de crisis por la pandemia del coronavirus, el tradicional acto religioso que año con año reunía a cientos de feligreses, se limitó a una simbólica celebración a la que se unieron las familias desde sus hogares, en un signo de fe, unidad y esperanza.

La jornada en decoro al patrono del pueblo, inició con la celebración eucarística, oficiada por el Pbro. Raymundo Pérez Bojórquez, ante una Iglesia vacía que hizo eco de la ferviente fe y gratitud de los lugareños, quienes desde sus hogares siguieron la transmisión de la misa.

“Comenzamos estos días de fiesta y celebración de un modo diferente, ciertamente, por la situación que estamos viviendo y siguiendo todos los cuidados correspondientes”, externó el sacerdote al iniciar su homilía.

El líder eclesiástico en la villa, reflexionó sobre la vida del fraile franciscano como un modelo de vida, exaltando esa virtud que lo distinguió por proclamar siempre la palabra de Dios y mostrando su disposición de ayudar al más necesitado.

Asimismo, mencionó la anécdota referente al milagro de San Antonio de Padua, que evocó a los momentos cuando el pueblo de Tekit vivió una terrible hambruna y él intercedió escuchando las plegarias.

“Rogamos a San Antonio que siga siendo ese milagro de fe para su pueblo. Le pedimos que interceda por toda la comunidad en estos momentos de dificultad, que su presencia nos permita ver a Dios. San Antonio de Padua, ruega por nosotros”, culminó.

Posteriormente y siguiendo las medidas sanitarias, un grupo pequeño de feligreses sacó a la venerada efigie del templo católico, para colocarlo en la camioneta y emprender la significativa procesión que se prolongó por cerca de tres horas, bajo un radiante sol.

Con ello, a bordo de un vehículo, al sonar de las campanas y el tronar de los voladores, el “Santo de todo el mundo” recorrió las principales calles de Tekit, pasando por las capillas para brindar su bendición a las familias en esta contingencia epidemiológica.

Al derrotero se unieron varios vehículos en caravanas; así mismo, la feligresía se unió desde sus hogares, elaborando altares en las puertas de sus casas donde colocaron imágenes de San Antonio de Padua.

A su retorno a la parroquia, la venerada efigie del patrono fue colocada nuevamente en su aposento. Para este año, de una forma diferente pero con una fe y devoción más latente, la grey católica celebró la fiesta de su santo patrono.

 

Siempre fieles a San Antonio  

En familia y desde sus hogares, la grey católica de la comunidad, se unió alegre a la celebración con motivo de la fiesta litúrgica de San Antonio de Padua, patrono de Tekit.

En estos días de contingencia sanitaria por el coronavirus, la feligresía ha dado muestra de fe ante la adversidad, sumándose a los festejos religiosos, de acuerdo a sus posibilidades para refrendar ese signo de ferviente devoción.

Con ello, el día de ayer, las familias elaboraron en la puerta de sus hogares significativos altares con la imagen del venerado fraile franciscano, para sumarse de forma simbólica a la procesión de San Antonio por las calles del municipio.

A dicho momento, se unieron en fe los fieles católicos que desde sus domicilios siguieron la transmisión de la misa y peregrinación; cuando la imagen se aproximó a su domicilio, las familias salieron a la puerta de sus predios para recibir la bendición, en tanto que otras, colocaron sillas desde donde contemplaron a la efigie.

En las calles, se observaron numerosos altares adornados de acuerdo a la creatividad de los lugareños; así mismo, algunos liberaron globos, reventaron voladores y lanzaron confeti como signo de alegría y regocijo por el paso de su santo patrono.

Muy diferente a celebraciones anteriores, pero con gran fe y gratitud, la grey católica de Tekit le cumplió al venerado San Antonio de Padua, en medio de la pandemia.

(Carlos Ek Uc)

 

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