Un cielo brumoso y gris trajo consigo la llegada del polvo del Sahara que desde ayer comenzó su paso por Yucatán y que se espera hoy y mañana alcance su máxima concentración, de acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para luego desplazarse sobre aguas del Golfo de México.
Desde ayer se empezaron a sentir los efectos por la presencia del polvo del Sahara que puso brumoso el cielo de Mérida, con un tono gris y que impedía el paso del Sol, lo que llamó la atención de los habitantes de la capital.
Este fenómeno se da cada año, pero en esta ocasión se generó mucha expectativa debido a la contingencia que se vive por el COVID-19 y por el paso de la tormenta tropical Cristóbal; en este sentido, la gente tomó el tema del polvo del Sahara como un fenómeno que se vendría a sumar a las calamidades.
Pero en realidad lo único que se observó durante el día fue un cielo nublado y a lo lejos se podía observar una especie de neblina que cubría los edificios más altos.
La administración del hotel El Conquistador permitió a los reporteros de POR ESTO! subir a su mirador para observar el cielo de Mérida y a los lejos se podía ver la bruma que cubría los edificios de mayor envergadura de la capital. Hacia los 4 puntos cardinales la escena era la misma, la de un cielo grisáceo y denso.
En Progreso
En el puerto de Progreso, hacia donde se dirigieron los reporteros, el cielo también se tornó denso sobre el mar y prácticamente todo el camino a la costa fue en la misma tónica, con escasa presencia del Sol.
Prácticamente toda la ciudad de Mérida estuvo nublada y de acuerdo con la Semarnat, la nube de polvo se desprendió desde la región del Sahel, en el desierto de Sahara, es un fenómeno común durante la primavera y el verano, cuando la escasez de lluvia se combina con vientos intensos en dicha región, generando desprendimientos de aire cálido, seco y saturado de aerosoles y polvo.
Se prevé, debido a la presencia del polvo, una disminución en la formación de nublados y lluvias, incremento en las temperaturas, disminución en la visibilidad y cielo brumoso.
Asimismo, la dependencia señala que la nube de polvo alcanzaría hoy jueves y mañana viernes su máxima concentración sobre la Península de Yucatán, para luego desplazarse sobre aguas del Golfo de México, pasando sobre las zonas costeras de Veracruz y Tamaulipas.
La trayectoria del polvo del Sahara por el mundo se puede seguir en vivo a través de internet (https://rammb-slider.cira.colostate.edu/).
Los efectos
A través de un comunicado, la Semarnat expuso que los principales efectos esperados en la Península de Yucatán son la reducción en la lluvia, incremento en las temperaturas, cielo brumoso y escasa nubosidad. Además, los atardeceres y amaneceres pueden tornarse en tonos rojizos debido a la interacción de los rayos solares con las partículas de polvo.
Este evento en particular se ha monitoreado en su recorrido por el Océano Atlántico y el Mar Caribe, donde ha ocasionado una reducción notable en la visibilidad, afectando la navegación marítima y aérea, y ha provocado un cielo brumoso.
Además, cuando estas nubes de polvo se desplazan por el Atlántico tropical limitan el desarrollo o intensificación de los ciclones tropicales, ya que son grandes extensiones de aire seco.
Finalmente, la noche del viernes 26 de junio, el fenómeno se desplazará hacia la parte Sur de Estados Unidos de América y dejará de afectar de manera directa al territorio mexicano.
¿Afectaciones?
De acuerdo con información difundida ayer por la UNAM, la nube de polvo podría traer afectaciones a las personas que ya padecen enfermedades respiratorias previas.
A través de una conferencia virtual, el Dr. Luis Antonio Ladino, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, expuso que el polvo del Sahara genera principalmente mala calidad de aire que puede entrar al sistema respiratorio pues contiene materiales que son potencialmente dañinos a la salud del aparato respiratorio.
Por lo anterior, se recomienda que se lleven a cabo medidas preventivas similares a las que ya se llevan a cabo por la contingencia de COVID-19, como permanecer en casa y protegerse con cubrebocas.
Sin embargo, el polvo en cuestión también transporta nutrientes que son buenos para la fertilización del océano y son benéficos también para la agricultura y puede, además, inhibir la formación de ciclones tropicales y para enfriar la superficie terrestre.
Información de David Rico