Elementos del Ejército utilizaron una lancha inflable tipo “Zodiac”
Elementos del Ejército Mexicano, personal del Ayuntamiento de Tekax y un nutrido grupo de voluntarios, sumaron fuerzas para evacuar a nueve personas de rancherías ubicadas en un largo tramo del camino que conduce a la comisaría tekaxeña de Xaya, quienes durante tres días quedaron atrapadas en sus comunidades por la inundación de las vías de acceso con volúmenes de agua que alcanzaron hasta dos metros de altura.
Para el rescate de las personas, los militares utilizaron una lancha inflable tipo “Zodiac”, adentrándose alrededor de dos kilómetros sobre el agua que cubría la carretera y luego caminar siete kilómetros más hasta llegar a las viviendas de los damnificados.
El viernes pasado los voluntarios y trabajadores de la Comuna tekaxeña utilizaron la creatividad para rescatar a siete personas por medio de un cayac, depósitos de agua de material plástico (que utilizaron como pequeñas lanchas), así como improvisadas balsas construidas con pedazos de unicel y garrafones vacíos de agua.
Sanos y salvos
Ayer, las primeras dos personas que fueron evacuadas con apoyo de soldados de la 32a. Zona Militar fueron el señor Mario Góngora Ariel, de 66 años, y su esposa Luisa Vidal, de 64 años, quienes desde hace tres días habían quedado atrapados en su vivienda de la ranchería Trinidad I. Tras llegar a tierra, la pareja fue cargada cada una por los rescatistas hasta llevarlos a una ambulancia de la Cruz Roja, estacionada donde terminaba el agua, para que un par de paramédicos evaluara su estado de salud. Sus familiares presentes, así como una docena de curiosos y los voluntarios socorristas, comenzaron a aplaudir al ver llegar sanos y salvos a la pareja de adultos mayores. Luego de unos 15 minutos de ser evaluados por los paramédicos, don Mario y su esposa, doña Luisa, bajaron por sus propios pies de la ambulancia y se retiraron a sus casas ante los aplausos de todos.
Los militares procedieron a dar otra vuelta al sector para intentar traer a otras siete personas que quedaban en las rancherías, pero al cabo de una hora, regresaron sin gente en la lancha debido a que nadie quiso regresar, bajo el argumento de que tenían que quedarse a cuidar a los animales y demás propiedades de sus viviendas.
Los soldados les dieron su consentimiento al considerar que estaban bien de salud, tenían suministro de alimentos suficientes, aunado a que el Ayuntamiento de Tekax ofreció que el lunes les enviaría apoyo alimentario adicional, además de que se espera que en los próximos días el agua que cubre los accesos descienda.
(Rafael Mis Cobá)