Yucatán

Vendedores de fuegos artificiales de Izamal sin clientes por coronavirus

Por culpa de la pandemia de COVID-19 se han cancelado múltiples eventos masivos en el interior del estado, lo que afecta de manera sustancial a giros como el de la pirotecnia
Foto: David Colli

Debido a la contingencia en la que se encuentra el Estado y por consiguiente la cancelación de las fiestas patronales y profanas; personas dedicadas a la producción y venta de fuegos artificiales se encuentran afectadas, como el caso de Santos Guillermo Castro Rejón quien lleva más de 20 años dedicados a la pirotecnia.

“Cuando nos enteramos de las cancelaciones de los gremios, las fiestas de los pueblos y los Festejos Patrios, nos pusimos muy tristes, le digo a mis hijos ¿qué vamos hacer?”, narró Castro Rejón, a quien la contingencia afectó su negocio del cual depende toda su familia, ya que sus siete hijos trabajan con él y cada uno ya formó su propio hogar.

Continuando con la plática, Santos menciona que ellos viven de los pedidos de voladores, que siempre han trabajado con la pólvora y hoy nada de esto pueden realizar.

En las inmediaciones de su taller, donde no se observa movimiento, fue explicando que hasta las mujeres laboran con él, “las esposas de mis hijos se encargan de doblar los cartones donde se fabrica el volador”.

Pero al llegar la contingencia por el COVID-19 todo se detuvo, no hay trabajo y sus hijos tuvieron que buscar otra fuente de empleo, uno se incorporó al equipo de Protección Civil, otro en una tortillería, otro de albañil y don Santos tuvo que vender un terreno para poder sustentar los gastos de estos meses.

Además de los gastos propios de la casa, el hombre comenta que cuenta con un permiso para manejar pólvora pero tienen que tener limpio su taller, así que también desembolsa para mantenerlo en buen estado pero sin recibir ingresos.

Años como fabricantes

Asimismo, dijo que ellos fabrican los voladores de trueno, luces y ciprés de 6 ruedas y crisantemos, lo único que compran en México es el material.

“Gracias a Dios durante este tiempo de trabajo logré mi permiso con número 2180, y en ese permiso hay varios requisitos que debemos hacer en el taller, tenemos un área exclusiva de polvorín 1 y 2, de producto terminado, de trabajo y bodega; todo está en regla pero lo único que no hay es el trabajo”, recalcó.

Las herramientas y algo de producto se quedaron estancados en un área exclusiva de dicho taller desde hace varios meses.

No hay apoyos

Esta situación la empezó a ver difícil desde el mes de abril hasta la fecha, durante este tiempo mencionan que ninguna autoridad se ha acordado de ellos, y aunque se inscribieron a los programas estatales, hasta ahora no han visto la ayuda.

Don Santos enfatizó que la única esperanza que tienen es que la autoridades dejen celebran el Grito de Independencia pues con eso algunos municipios le encargarían productos.

David Collí