Especialistas en seguridad vial y urbanismo consideraron que ante el hecho de que el Periférico de Mérida es una vía letal y crece el número de siniestros, se requiere hacer adecuaciones como establecer velocidades mínimas de 80 kilómetros por hora en el cuerpo central y de 50 kilómetros en el cuerpo lateral, pero además ya no debe considerársele como una vía rápida, sino como una avenida más que se encuentra prácticamente dentro de la ciudad.
René Flores Ayora, Ingeniero en Tránsito y Auditor en Seguridad Vial por el Centro Nacional de Prevención de Accidentes (Cenapra), señaló que es urgente disminuir el límite de velocidad permitido en el Anillo Periférico, pues va en aumento el número de muertes por siniestros viales, siendo hoy una de las vías más mortales.
Expuso que, en lo que va del año, se han presentado al menos unas 120 muertes en siniestros viales en todo el Estado y son alrededor de 20 muertes que se han dado en el Periférico.
Visión Cero
Mencionó que hace unas semanas se aprobó en el Congreso del Estado la Ley de Seguridad Vial, que debe ser el punto de inicio para una política pública para todo el estado de una Visión Cero, en la cual la movilidad está enfocada en el peatón y no en los vehículos.
“Bajo esta visión nadie debe morir ni sufrir lesiones en siniestros viales y, para ello, es necesario trabajar en forma simultánea, de manera multisectorial, los expertos y la ciudadanía, para encontrar las mejores soluciones”, expuso.
Expuso que son diferentes factores los que están relacionados en un siniestro, pero casi siempre figura el exceso de velocidad, además del consumo de alcohol, las imprudencias, no usar cascos certificados o no usar el cinturón de seguridad, además de que no se usan los sistemas de retención para menores, lo que lleva a accidentes como el que se dio en el Periférico hace unas semanas, en el que fallecieron dos bebés.
Además, dijo que la Ley de Seguridad Vial deberá traer consigo un reglamento, políticas públicas, además de un Observatorio de Seguridad Vial y un Consejo Consultivo.
Cifras reales
“Necesitamos cifras reales, ya no se pueden maquillar cifras; tenemos que ver la realidad con datos certeros, sin maquillaje, para poder tomar las mejores decisiones”, expuso.
Reiteró que desde hace años ha propuesto que se disminuya la velocidad máxima en el Periférico, porque finalmente está comprobado que reducir la velocidad es salvar vidas, porque entre más velocidad más riesgo de muerte.
El especialista propuso que se establezca una velocidad máxima en el Periférico de 80 kilómetros por hora en el cuerpo central y una máxima de 50 kilómetros por hora en el cuerpo lateral de baja velocidad.
Pero, además, comentó que se necesitan otras acciones que son accesibles, como el recarpeteo del pavimento, componer las luces de iluminación vial para evitar claroscuros, además de que se instalen radares de velocidad y se aplique la ley a quienes la contravengan.
También –dijo– se pueden instalar pantallas de Mensaje Variable, además de colocar vallas de tres crestas para que los vehículos no se vayan a la hondonada.
Flores Ayora dijo que es común el impacto de los vehículos en columnas y otras estructuras, por lo que se deben colocar trafitambos con agua, en los postes de luz y en las columnas de los pasos a desnivel.
Reingeniería vial
Señaló que es indispensable también una verdadera Campaña Emocional Objetiva en Seguridad Vial, en la que se genere conciencia en los peatones, ciclistas, motociclistas y automovilistas, para que no se lleven a cabo conductas temerarias.
Finalmente comentó que es necesario hacer una reingeniería vial en toda la vía, incluyendo retornos y las áreas de entrecruzamiento.
Dijo que al hacer más de 50 kilómetros de calles laterales del Periférico se podrá abatir hasta en un 50 por ciento el número de accidentes, ya que son calles de baja velocidad por las que pueden transitar las motos o los peatones, por ejemplo.
Añadió que hacen falta señalamientos en las zonas peatonales y se necesita una buena iluminación vial, además de que se deben pintar de colores amarillos, para prevención, los postes de luz y otras estructuras que a menudo no se ven.
Ya no es un Periférico
Por su parte, la Dra. Silvana Forti Sosa, directora del Laboratorio Urbano de la Universidad Modelo, consideró que uno de los temas principales con los siniestros que se dan en el Periférico, es que éste ya debe ser considerado más bien como una avenida que está dentro de Mérida.
Dijo que tal vez en sus inicios la vía fue tratada y conceptualizada como un Periférico a las orillas de la ciudad, pero hoy la vía está prácticamente dentro de Mérida, con muchas poblaciones cercanas y casas, gente que tiene que cruzarla todos los días.
“Creo que se necesita una transformación en este sentido, porque es una vía impermeable, por la que las personas no pueden atravesar, pero tenemos un gran número de colonias, casas, fraccionamientos, que prácticamente están pegadas a la vía”, comentó.
Al estar dentro de la ciudad –comentó–, el Periférico más bien debe ser tratado como una avenida, no como una vía de alta velocidad.
“Hablamos que debería ser ya una vía de menor velocidad, incluso con semáforos y pasos peatonales, porque los puentes que hoy tenemos en esta vía son ‘anti peatonales’ más bien”, comentó.
Otro de los temas en el Periférico es la gestión de carga, porque en el último accidente que se dio en el que fallecieron un par de ciclistas arrollados por un tráiler, se ve la necesidad de que se establezcan horarios específicos para el tránsito de los vehículos pesados, además de que también se necesitan acciones que protejan al ciclista.
“Creo que el Periférico debería cambiar su formato porque prácticamente está dentro de la ciudad y ya no a las orillas, y hoy tenemos una gran población que vive del otro lado y que todos los días lo debe cruzar con grandes riesgos”, comentó.
Por David Rico