Desde finales de año hasta apenas ayer por la mañana, vecinos que habitan en la “Ciénaga 2000”, justo en una de las entradas al puerto, aseguran ver constantemente a un par de cocodrilos cuando hay creciente en el canal; lo que más sorprende de las palabras de los lugareños es que aunque saben del peligro que corren esto ya es “cosa de todos los días”, sin embargo no quitan el dedo del renglón y están a la espera de su captura.
“Ya hasta no es extraño verlo, salgo a trabajar a las siete de la mañana y cuidando el paso me alejo de esta zona, uno tampoco es de acero y tiene que estar precavido, pero durante años hemos visto de estos animales, sí, es hasta normal para nosotros”, declaró Porfirio Pérez Canché, testigo del último hallazgo, justo ayer por la mañana.
Como se mencionó, las salidas de los reptiles se dan simultáneas: uno habita enfrente de la reserva “La Ría”, en el canal de la Ciénaga, a espaldas de un área habitada por niños y gente de la tercera edad; el otro está enfrente, del lado de las glorietas que conectan a la carretera federal para viajar a Mérida.
“Me atrevería a decir que este que vive aquí cerca de las casas mide unos dos metros de largo y está pesado, es un monstruo”, aseguró otro vecino del rumbo; cabe señalar que estas características coinciden con el usuario “Juan Vela”, que desde sus redes sociales publicó una fotografía del anfibio que causó revuelo entre la ciudadanía, otros decían que se trataba de un montaje.
Las autoridades han acudido a los llamados del conjunto vecinal; sin embargo, su captura ha sido casi imposible por las habilidades de defensa que tiene el “peculiar vecino”.
“Hemos venido a custodiar el área varias veces, porque hay gente del programa ‘Empleo temporal’ que lleva a cabo limpieza en la zona urbana de este sector del puerto y se prevé su seguridad”, expresó Edgar Barragán Solís, trabajador del sector ecologista.
En diferentes circunstancias se han visto decenas de estos animales en este espacio, siendo sorprendidos incluso en la acerca de las calles; hasta ahora sólo se recuerda hace cerca de un año, el intento de ataque de estos reptiles a un par de perros que merodeaban por el lugar.