Históricamente, de una manera diferente, se celebró la fiesta patronal durante el Día de Reyes, siguiendo las normas de la nueva normalidad, a pesar de que el santuario religioso permaneció cerrado, la homilía de la festividad en honor a los Santos Patronos se llevó a efecto.
Al mediodía de ayer y cumpliendo con los protocolos sanitarios se realizó la misa de la fiesta patronal en la iglesia de los Tres Santos Reyes, que fue oficiada por el Arzobispo Gustavo Rodríguez Vega.
Con el acceso restringido, pues sólo se permitió la entrada a los representantes del presbiterio del Decanato, sacerdotes de las parroquias vecinas y autoridades municipales, encabezadas por el presidente municipal Mario González González; la reina de la Feria, Pamela Arceo Gómez, miembros del Consejo Parroquial, custodios y miembros del Gremio Católico Juvenil, que desde hace muchos años acuden a la cita en este santuario el 6 de enero.
El ingreso al templo inició a las 11:00 de la mañana con el fin de cumplir con las medidas sanitarias como la sana distancia, se les tomaba la temperatura a los feligreses y se les aplicaba gel antibacterial, todo de manera ordenada, con una asistencia del 30% de la feligresía.
En la celebración eucarística, Monseñor Gustavo Rodríguez Vega mencionó que la Epifanía significa manifestación, porque la Navidad es la manifestación de Dios en carne humana, pero ante todo se trata de la manifestación del Niño de Belén a todos los pueblos de la Tierra, representados en los Magos venidos del Oriente.
“Por Magos hemos de entender hombres de ciencia, sabios, investigadores, se les llama Reyes por la profecía que anunciaba la llegada de Reyes de otros a los pueblos para adorar al Señor y por la riqueza que suponía su viaje y sus regalos; se dice que fueron tres, porque fueron tres los regalos que ofrecieron al Niño Jesús: oro, incienso y mirra; varias tradiciones antiguas hablaban de distintos números de Magos, pero prevaleció la tradición que afirma que eran tres y que reconocen los nombres de Melchor, Gaspar y Baltazar”.
Numerosos peregrinos siguen acudiendo al encuentro con los Reyes Magos, sin embargo, por primera vez, por la pandemia, la fiesta patronal se está haciendo de manera diferente, las sagradas imágenes se han estado colocando frente al santuario para su veneración, sin que nadie pudiera ungirlos.
La noche del pasado martes numerosos feligreses y peregrinos se hicieron presentes frente al templo para venerar a las sagradas efigies, donde también se celebró la serenata en la que se puso de manifiesto el fervor hacia Gaspar, Melchor y Baltazar.
La madrugada de ayer miércoles 6 de enero, los peregrinos siguieron arribando a la ciudad con la finalidad de cumplir con su promesa anual de visitar a los Tres Santos Reyes, que sin importarles la pandemia y no poder estar cerca de las sagradas imágenes, cumplen debido a que es más grande su fervor, depositando aquí sus plegarias a pesar de que el santuario esté cerrado.