Yucatán

Mérida: Controlarán acceso de peregrinos guadalupanos al Santuario de San Cristóbal

La Arquidiócesis de Yucatán dictó normas para la celebración del Día de la Virgen de Guadalupe en la entidad, por lo que se aplicarán medidas restrictivas debido a la pandemia por COVID

En grupos o en solitario, a pie o motorizados, desde localidades lejanas o colonias de Mérida, este fin de semana el Santuario de la Virgen de Guadalupe, en el barrio de San Cristóbal, espera la llegada de miles de fieles en su visita anual a la “Morenita del Tepeyac”, pero en esta ocasión se buscará evitar concentraciones masivas.

El festejo religioso, que por segundo año consecutivo se realiza con restricciones a causa de la pandemia, comenzó en Mérida el 5 de noviembre pasado, con la bajada de la imagen, y alcanzarán su punto máximo desde este sábado y, desde luego, el domingo 12.

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El presbítero José Gilberto Pérez Ceh, párroco del Santuario Guadalupano, explicó que debido a la pandemia buscarán evitar la aglomeración de personas, por lo que se tendrán accesos controlados mediante filas, y en las misas no se llenará el aforo del templo y serán a puertas cerradas.

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Este sábado, desde las 8:00 horas, comenzará la veneración, que se prolongará hasta las 18:00; a partir de las 19:00 habrá misas en horas consecutivas, esto es, a las 20:00 y 21:00, luego a las 23:00 y 00:00 del domingo.

La celebración eucarística de las 21:00 horas será oficiada por el Arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega, y la de las 00:00 por el Arzobispo auxiliar Pedro Mena Díaz. Ambas se realizarán con presencia de personas que previamente se anoten y serán a puertas cerradas, aunque serán transmitidas por medio de la página de Facebook de la parroquia.

Por ese mismo medio se transmitirán videos de un mariachi que previamente llevó “Las Mañanitas” a la Virgen y que ya ha sido grabados, para evitar que la gente se aglomere en las cercanías del templo en espera de esa tradición.

Eventos dominicales

Para el domingo 12 de diciembre, el presbítero Pérez Ceh explicó que la primera misa es a las 7:00 horas, luego habrá celebraciones a las 10:00 y 11:00, todas con cupo limitado, y a las 12:00 se abrirá otro espacio de veneración, que terminará a las 18:00, una hora antes de la última misa de acción de gracias del día, a cargo del arzobispo emérito Emilio Carlos Berlie Belauzarán.

El sacerdote recordó que desde hace varias semanas se ha pedido a los feligreses que acudan a las misas de otras capillas o iglesias, para evitar una concentración masiva en el santuario del barrio de San Cristóbal.

Para evitar percances, a partir de las 16:00 horas de este sábado se cerrarán las calles alrededor de la parroquia, y el único acceso será por la calle 50 con 67, y la salida será por la calle 69 con 52, para de esta forma tener control en los filtros de salud.

Fe, imparable

Pérez Ceh indicó que a pesar de que la Arquidiócesis pidió a los sacerdotes que no promovieran la organización de grupos de antorchitas, debido a que aún se está en pandemia, al Santuario Mariano de San Cristóbal han llegado grupos, aunque en menor cantidad que en años anteriores.

 “Son grupos de familias, vecinos, amigos o trabajadores, pero en muchas ocasiones no tienen contacto con las parroquias de su comunidad y eso no lo podemos controlar. No les cerramos la iglesia, desde luego, pero no podemos hacer lo que hacíamos en años anteriores, cuando se les daba un salón para descansar, se les prestaba los baños o incluso se les brindaba alimento”, dijo.

Estos grupos por el momento solo pasan a hacer su veneración, se les da la bendición y siguen su camino. “Nos gustaría que fuera como antes, que se llene el templo, que se desborde la gente, pero sabemos que estamos en pandemia y debemos de tener mucho cuidado”.

Por último, el sacerdote comentó que el acontecimiento guadalupano es un milagro que se va dando cada año, y ahora a pesar de la pandemia, mucha gente en su casa ha hecho su pequeño altar a la Virgen.

 “Lo importante es no dejar de celebrarla, porque lo que ella nos trajo sigue vigente, que es esa confianza de creer y acercarnos a Dios y de ahí su frase ¿no estoy yo aquí que soy tu madre? Que es un llamado de seguir su ejemplo de santidad”, expresó.

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CG