Se estima que en el municipio 341 personas han sido diagnosticadas con autismo. En el Centro de Salud, a través del Programa Promoción de la Salud, se realizan acciones con el enfoque informativo y educativo para atraer la atención de la población hacia este grupo, no para considerarlos especiales o incapaces, sino para aceptarlos en el círculo familiar y colectivo.
La celebración del Día Internacional del Autismo, cada 2 de abril, sirve para promover la aceptación de quienes tiene este trastorno, como personas autónomas, con todos los derechos en la comunidad.
El promotor del Centro de Salud, Alfredo Couoh Kuyoc, externó que “no se ha identificado una causa específica del trastorno, pero se asocia su origen a la genética, alteraciones en algunos neurotransmisores, factores ambientales, infecciosos o consumo de drogas durante el embarazo, complicaciones obstétricas durante el parto y el entorno disfuncional donde interactúa el niño o niña en los primeros años.
Explicó que el progreso del sistema nervioso desde el vientre materno es una transformación compleja, que el resultado de este proceso permite llegar a un grado óptimo de las estructuras, el desarrollo de habilidades, que en su conjunto se llaman personalidad y es lo que nos hace diferentes a los demás, por lo que cuando un factor altera el normal desarrollo cognitivo del cerebro aparece el trastorno del espectro del autismo, que por lo general afecta dos áreas, la relacionada con la comunicación y con la interacción social.
Por todo lo anterior, indicó que en el Centro de Salud, en las consultas rutinarias a menores de 5 años, cuando se sospecha de algún trastorno de neurodesarrollo se refieren al segundo nivel para definir el diagnóstico y que los casos confirmados sean tratados por especialistas de psicología o psiquiatría en la ciudad de Mérida.
Centro de Atención Múltiple
Mónica Sánchez Quintal, directora del Centro de Atención Múltiple Víctor Cervera Pacheco, reveló que en ese centro educativo actualmente se atienden dos niños con ese trastorno, y que en el ciclo pasado contaban con uno más que se dio de baja.
Mencionó que se estima que un tres por ciento de la población tiene autismo, pero que no todos los casos se registran, que varía según el nivel de afectación, desde el leve, donde el niño muestra interés específico en algo, siendo muy inteligente, pero sin importarle nada más, tal y como lo pone de manifiesto el alumno Jesús Mauricio Bobadilla Chí, quien sorprendentemente se sabe de memoria las fechas de fallecimientos de varios artistas y personajes célebres, hasta los casos más graves donde, de plano, la persona no se relaciona, no se comunica y trata de estar completamente aislada.
A los padres les recomendó estar pendientes de los hijos, de lo social, pues pueden tener a un niño autista sin saberlo, dijo que a ellos no les gusta mucho el ruido, el amontonamiento de gente, aunado a que tienen una rutina muy constante y obsesiva en algo, por lo que exhortó a que si detectan en algunos de estos síntomas acudan a un neurólogo para que les dé el diagnóstico de los pequeños; a la sociedad pidió que tengan mucha paciencia, que sean tolerantes con las personas autistas para no discriminarlos, recordando que la inclusión es el factor base aceptando sus características.
Palacio Municipal se tiñó de azul
Como acto simbólico por el Día Internacional del Autismo se encendieron luces azules en el Palacio Municipal, sumándose las autoridades municipales a esta celebración y a la campaña Iluminémonos de azul, promovida por Corazones Unidos de Diversidad Neurológica, enfatizando la importancia de la difusión y concienciación sobre este trastorno.
Heidi del Roció Martínez Pacheco, madre de un niño autista, en el evento dijo que a nadie la preparan para ser madre cuando su hijo tiene una condición distinta a la de la mayoría, pero que encontró mucho apoyo y orientación, puntualizó que el autismo no es el problema, sino la ignorancia, el desconocimiento y los prejuicios de las personas y las instituciones, por ello destacó que se debe reconocer con orgullo la condición de los hijos con autismo sin una pizca de vergüenza, al contrario, porque lo que han logrado les ha costado el doble de esfuerzo que a la mayoría de los niños, que ellos están en constante lucha por la dignidad y lo que necesitan en gran medida es que se respeten sus derechos, que se fomente su participación en los espacios públicos, que se les acoja en las escuelas y que se les reconozcan sus capacidades y fortalezas.