“A los 19 de edad emigré a los Estados Unidos por necesidad económica, país donde he vivido más de 50 años, pero me gustaría regresar para morir en mi tierra natal, Tunkas”, mencionó Nicanor Canul Yáñez.
Acompañado de su esposa Marlene Mena de Canul, el paisano fue recibido por su cuñada Lendy Mena, quien manifestó que estaba ansiosa de volver a ver a su hermana y por eso procuró estar en el aeropuerto una hora antes de que aterrizara el vuelo procedente de Miami.
“¡Bendito Dios, me fue de maravilla!”, dijo Canul Yánez. Agregó que “durante muchos años estuve trabajando en la Ciudad de San Francisco, California, limpiando pisos, lavando platos, como ayudante de cocina y muchas otras actividades”.
“La nostalgia de encontrarme a mis hermanos que viven en Tunkas y aprovechar a relajarme un poco me trajo la nostalgia, porque allá (en los Estados Unidos) es una “jaula de oro”. Se vive sólo para ir a trabajar y regresar a su casa. Son pocas las ocasiones que se tienen para salir a dar la vuelta, porque hay mucha vigilancia por parte de los agentes de migración”, dijo.
“Hoy, no tengo porque esconderme de la migra. Ya cuento con las dos nacionalidades, puedo salir y regresar sin ningún problema”, dijo el visitante.
SY