Desde la tribuna del Congreso local se expuso que William Román Pérez Cabrera, a quien se le retiró la candidatura a la alcaldía de Kanasín por violencia política en razón de género, es uno de los 43 alcaldes que buscan la reelección y que tienen cuentas pendientes por aclarar del 2019 ante la Auditoría Superior del Estado (ASEY). En este caso recibió 32 observaciones del órgano fiscalizador y ninguna pudo solventar, por lo que no ha demostrado el uso y destino de 51 millones 928 mil pesos.
Los señalamientos fueron hechos por la diputada Milagros Romero Bastarrachea, integrante de la Comisión de Vigilancia de la Cuenta Pública, Transparencia y Anticorrupción, al ponerse a consideración los informes individuales de auditoría de la cuenta pública 2019 enviados por la ASEY, los cuales fueron aprobados.
La legisladora recordó que son 43 alcaldes que buscan la reelección: en Akil, Baca, Bokoba, Buctzotz, Cacalcheén, Cansahcab, Cantamayec, entre otros municipios.
“Todos están dejando pendientes sin justificar en sus cuentas públicas, algunos no graves y otros graves, como es el caso del alcalde de Kanasín, quien fue acusado de violencia política en razón de género. Tiene denuncias en la Fiscalía Anticorrupción de Yucatán por presuntos desvíos de recursos, tiene quejas ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey), el Instituto Estatal de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de datos personales (INAIP) y la misma ASEY”, dijo.
Expuso que el exabanderado del PRI por Kanasín, tuvo 32 observaciones por 51 millones 928 mil pesos, de las cuales ninguna solventó. Como ejemplo, mencionó que gastó 894 mil pesos en los meses de febrero y noviembre de 2019 en “apoyo social”, pero al momento de hacerle su auditoría no proporcionó solicitud del apoyo, ni constancia de recepción firmada por los beneficiarios de los apoyos.
Otro ejemplo, comentó, es de los recursos del Fondo para la Infraestructura Social Municipal y de las Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal (Fism-Df) que se detectó un saldo por 10 millones 152 mil 200 pesos que, se supone, están destinados para infraestructura y obras establecidas, pero no se hizo nada con ese dinero. “Sigue ahí en la cuenta, pero tampoco han presentado evidencia de que el recurso ya se reintegró a la Tesorería de la Federación”, denunció.
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JG