En relación con las afirmaciones de José María Palomo y otros extrabajadores de “El Corchito”, quienes entablarían una demanda por los ecocidios que ocurren dentro de la reserva, el director del Patronato Cultur, Mauricio Díaz Montalvo, aclaró que tales aseveraciones son falsas, pues este concepto se refiere a la destrucción del medio ambiente, en especial de manera intencionada, lo que precisó que desde luego no es el caso, sino todo lo contrario.
El funcionario indicó que el cuidado de la reserva ecológica ha incluido gestiones ante las autoridades locales y federales como la Semarnat, que ha emitido dos dictámenes favorables de impacto ambiental, uno de la reserva y otro del parador, así como las recomendaciones de la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Gobierno del Estado.
El funcionario también informó que las copiosas lluvias que azotaron a todo el estado el año pasado, dañaron algunos manglares, no sólo por los fuertes vientos sino también por las inundaciones.
Explicó que cuando esto ocurre el PH del agua cambia y esto ocasiona que algunos no resistan y mueran, pero al cabo de cierto tiempo, crecen otros nuevos. “Es un proceso de la naturaleza”, indicó.
En relación a los animales silvestres, Díaz Montalvo explicó que los mapaches y los coatíes, que son parte del atractivo, tienden a buscar espacios en donde estén a salvo, luego de las inundaciones que alcanzaron casi un metro en el lugar, y por ello, estuvo cercado casi un año.
“Hoy día, hay crías de mapaches, pero no se muestran por ser pequeños y tres hembras de coatíes están embarazadas de modo que poco a poco se irá repoblando de modo natural el lugar con estas especies”, externó.
Agregó que además se cuenta con un reglamento que se aplica de manera estricta. Entre otras cosas, se prohíbe el uso de bronceadores u otros químicos para bañarse, no se permite pasar con comida “por los restos que pueden contaminar el sitio y por posibles ataques de los animales silvestres, incluso la gente debe usar ropa adecuada para bañarse”, agregó.
En torno a la malla que se utiliza en los canales que se conoce como “geomembrana”, se compró la de mejor calidad, es especial y no es contaminante.
Asimismo, desestimó las acusaciones del extrabajador de la reserva, pues no están basadas en la realidad. Atribuyó dicha inconformidad a su propia decisión de traspasar la reserva al Gobierno del Estado en el año 2015.
Por último, agregó que Cultur se apegará a lo que marcan las normas en todos los sentidos y que seguirá con el cuidado permanente para el disfrute del sitio el cual, dijo, puede constatarse en cualquier momento.
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JG