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La Secretaría de Turismo federal (Sefotur) señaló que trabajan para que el parador de Chichén Itzá sea más amigable al turismo

El titular de la Secretaría de Turismo federal (Sefotur), Miguel Torruco Marqués dijo que se trabaja con el Gobierno del Estado de Yucatán y con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para resolver el tema de los artesanos ambulantes al interior de la zona arqueológica de Chichén Itzá, el cual “ha sido un problema que ha perjudicado la imagen, pero también hay que cuidar el empleo”.

El funcionario federal visitó ayer la antigua ciudad maya en compañía de la secretaria de Turismo de Yucatán, Michelle Fridman, y del secretario general de la Organización Mundial del Turismo, Zurab Pololikashvili. Desde el lugar hizo un llamado a la gente para que viaje con las precauciones necesarias y señaló que en el país ya se está reactivando la industria. Aseguró que México será potencia turística otra vez.

En entrevista, habló de los artesanos que venden sus productos dentro de la zona arqueológica y comentó que, en su estadía en Yucatán, donde tuvo dos días de actividades, platicó del tema, en busca de solución, con el gobernador Mauricio Vila Dosal, y con el director general del INAH, Diego Prieto. Expuso que la intención es que este tema se pueda resolver en este sexenio.

“Ha sido un problema muy antiguo que ayer lo hablamos con el Gobernador y con el director general del INAH, se va a resolver ese añejo problema que ha perjudicado la imagen, pero también hay que cuidar el empleo”, expuso.

En entrevista aparte, Michelle Fridman, dijo que es un tema que se debe resolver con la participación de todos los actores y de forma coordinada.

“Hemos ya analizado algunas estrategias y será con la coordinación de los tres niveles de gobierno, ahora que retomamos el turismo, podamos ponernos de acuerdo para hacer el sitio más amigable para el turismo”, expuso.

“Reubicación dentro de la misma zona, ¿podría ser una opción?”, se le preguntó.

 “Hay muchos puntos que estamos analizando”, señaló.

Torruco Marqués se refirió también a las designaciones de Pueblos Mágicos, que se espera Yucatán pudiera presentar nuevas propuestas en las próximas convocatorias.

Se le preguntó nuevamente si estas designaciones a los sitios turísticos tendrán recursos para su promoción y mantenimiento.

“Antes había presupuestos diversos, pero ahora se canalizan a través de la Sedatu (Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano), para ver qué ciudades irán interviniendo a lo largo de esta administración.

El titular de la Sectur dijo no tener información de que algún sector de la población de Sisal, nombrado recientemente Pueblo Mágico, ha pedido salir de este programa al no tener la capacidad de recibir tanta gente en esta pandemia.

“No estoy informado al respecto, todos son libres de hacer lo que quieran y en lugar de pedir que se salgan es pedir apoyos determinados a las diferentes secretarías del Estado y tener comunicación directa”, comentó.

Torruco Marqués, acompañado de una nutrida comitiva de invitados y funcionarios, así como de representantes de la Organización Mundial del Turismo (OMT), realizó una visita al Convento de San Antonio de Padua de Izamal, donde también acudió a un par de hoteles boutique.

Recorrido por Izamal

En el convento fue recibido por el Fray Juan Pablo Chávez Vargas, secretario de la Provincia San Felipe de Jesús de los Franciscanos que tiene su sede en Izamal. El religioso dio un breve recorrido al funcionario por el inmueble que data de 1549 y que hoy es Santuario de la Virgen de la Concepción.

Entre otras cosas, el Fraile habló de la llegada del Papa Juan Pablo II, el 11 de agosto de 1993, con la intención de reivindicar a la Iglesia Católica y pedir perdón por los daños hechos a los pueblos originarios, aunque dijo que fue de una forma “no muy ortodoxa”.

En el interior del recinto, Torruco Marqués recibió una amplia explicación del retablo del lugar, que se hizo el original en 1548 pero que se quemó en 1820, con las dos imágenes originales que había traído de Guatemala Fray Diego de Landa.

“Cuando se quemó trajeron otra imagen que estaba en Yucatán, en el convento de San Francisco y continuó la devoción; se hizo un segundo retablo, que no fue hecho muy con las medidas específicas, en este tiempo la situación económica era difícil”, comentó.

Torruco Marqués estuvo asistido en todo el viaje por personal que continuamente le proveyó de líquidos y toallas húmedas para refrescarse y limpiarse el sudor.

Al término de su estadía en Izamal, el contingente se dirigió a la zona arqueológica de Chichén Itzá donde, entre otros sitios, recorrió los alrededores de la pirámide de El Castillo y el Juego de Pelota. El grupo del funcionario federal estuvo asistido por el arqueólogo Juan Octavio Juárez Rodríguez.

El funcionario se le vio intercambiar comentarios con la secretaria de turismo de Yucatán en varias ocasiones, relativos a los artesanos que venden sus productos al interior de la zona arqueológica.

Fue informado de que el Juego de Pelota de Chichén Itzá es considerado el más grande de Mesoamérica y que no se trataba de un deporte específicamente, sino que tenía un sentido ritual y que incluso finalizaba con sacrificios en algunas ocasiones.

El arqueólogo expuso que se trabaja mucho para que se cumplan las medidas sanitarias el interior del lugar, pero algunas personas se resisten a usar el cubrebocas, como el caso de los rusos y ucranianos, porque dicen que ya están vacunados.

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JG

 

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