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Yucatán

Más de 111 mil niños menores de seis años de Yucatán viven en condiciones de pobreza

El “Ranking de pobreza en Primera Infancia” revela que más de la mitad de los niños menores de seis años que viven en la Península lo hacen en condiciones de pobreza
La revisión del crecimiento de la pobreza en la primera infancia muestra que en Yucatán subió 3.1 puntos porcentuales
La revisión del crecimiento de la pobreza en la primera infancia muestra que en Yucatán subió 3.1 puntos porcentuales / Uriel Fernández

La pobreza y pobreza extrema en los niños menores de seis años de la Península se incrementó en 2020 con relación a la situación que prevalecía en 2018, por lo que se encuentran más vulnerables y además carecen al menos de un derecho social como alimentación, salud o educación.

Así lo revela el “Ranking de pobreza en Primera Infancia”, un análisis que elaboró la iniciativa ciudadana Pacto por la Primera Infancia a partir de los datos de Coneval, al mostrar que tan sólo en Quintana Roo la condición de pobreza en los niños de cero a seis años subió 15.2 puntos porcentuales, al pasar de 41.2 en 2018 a 56.4 por ciento en 2020.

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Al hacer una comparación por rangos de edad entre la población de México que vive en pobreza, se incrementa aún más entre los niños menores de seis años, pues en general 43.9 por ciento de los mexicanos se encuentra en esa condición, pero conforme la edad disminuye, aumenta la pobreza, pues los datos muestran que 52.6 por ciento de los menores de 18 años vive en un hogar donde no les alcanza para adquirir tanto las necesidades alimentarias como las no alimentarias y no tienen derecho a la salud o a la educación o a una alimentación digna.

La situación se agrava aún más entre los menores de seis años, porque a nivel nacional 54.3 por ciento de este sector de la población vive en hogares pobres porque no cuentan con el sustento para obtener sus necesidades básicas, lo cual aumentó 1.8 puntos porcentuales con relación a 2018, ya que en ese año 52.5 por ciento de la población menor de seis años vivía en pobreza.

“Nos referimos a pobreza cuando el ingreso familiar no alcanza para poder cubrir satisfactores alimentarios como no alimentarios, esto lo traducen en términos monetarios, 3 mil pesos es la línea de pobreza, si ganas menos de eso, caes en pobreza y al menos una carencia social”, explicó Alberto Sotomayor, coordinador de Investigación del Pacto por la Primera Infancia (PPI).

Con estos nuevos resultados de 2020 significa que en promedio cinco de cada 10 niños menores de seis años en Yucatán, Campeche y Quintana Roo viven en una familia pobre, porque ésta no cuenta con el sustento para ofrecerles una mejor calidad de vida, debido a que no tienen para alimentarlos adecuada y nutritivamente y además no tienen servicio médico o no van a una estancia infantil o al preescolar.

La revisión del crecimiento de la pobreza en la primera infancia muestra que en Yucatán subió 3.1 puntos porcentuales, 

mientras que en Campeche se elevó dos puntos porcentuales, es decir, que más niños menores de seis años viven en hogares pobres, por lo que son más vulnerables.

“Cuando vemos cómo se encuentran los estados de la península con respecto a las otras entidades, vemos que Campeche se ubica en el noveno lugar en cuanto al nivel de pobreza infantil con el 61.2 por ciento, que es arriba de la media nacional que es de 54.3, es decir, que en esta entidad en promedio seis de cada 10 niños de cero a seis años padecen carencias porque viven en condición de pobreza”, detalló el coordinador del Ranking de pobreza en la Primera Infancia.

Esta cifra de 61.2 por ciento es casi siete puntos porcentuales por arriba de la media, entonces Campeche está dentro de las primeras 10 entidades con el mayor número de niños en pobreza.

En el caso de Yucatán, Alberto Sotomayor, detalló que se ubica en el lugar 12 con el 56.9 por ciento de niños menores de seis años en hogares pobres, arriba del promedio nacional por más de 2.5 puntos porcentuales.

En tanto que Quintana Roo se coloca en el lugar 13 a nivel nacional, pues 56.4 por ciento de los menores de seis años vive en familias con carencias porque sus ingresos no son suficientes para adquirir productos de la canasta básica, además de que estos pequeños no tienen acceso a un servicio de salud o no van a la escuela.

 

No alcanzan a cubrir la canasta básica

En entrevista con POR ESTO! el coordinador del ranking explicó la pobreza extrema aún es más bajo porque a estas familias ni siquiera les alcanza para cubrir la canasta básica alimentaria y se les vulneran más de tres derechos.

Campeche se ubica en el quinto lugar de niños menores de 6 años que viven en pobreza, con el 16.9, mientras que el promedio nacional es 11.8 por ciento de niños en pobreza, es decir, que 17 menores de seis años de cada 100 que viven en esta entidad se encuentra en condiciones de pobreza extrema.

Esta pobreza es histórica, pues Chiapas se encuentra en primer lugar, en segundo Guerrero, Oaxaca en tercero, Veracruz en cuarto y quinto Campeche.

En el noveno lugar está Yucatán, que en esta variación se incrementó de manera importante sus porcentajes y subió a 13.6 por ciento, casi dos puntos porcentuales por arriba de la media nacional. En el onceavo lugar también por arriba de la media, se encuentra Quintana Roo con el 12 por ciento, también por arriba de la media nacional.

“Hay más niños pobres en la península y los que están en pobreza extrema se les están vulnerando de manera sistemática sus derechos sociales porque tienen más de tres carencias sociales, sobre todo, rezago educativo.

Estamos tirando por la borda todo el potencial que tienen los niños, los estamos condenando a ser parte de una generación perdida, que tengan riesgos 

en su salud, que no adquieran los conocimientos adecuados, a que vivan en condiciones poco dignas y lo podemos traducir en que en un futuro la cantidad de recursos para atender a esta población van a ser mayores.

Alberto Sotomayor apuntó que en términos de conveniencia lo que un gobierno invierta en la primera infancia va a terminar en una altísima tasa de retorno, porque se va a evitar muchos problemas en el futuro, pero al no invertir en la primera infancia, lo que ocurre es que un estado corre el riesgo de que crezcan con esas carencias y entonces tengan menos productividad, una población enferma y con rezago educativo.

“Si realmente vemos la prioridad de la primera infancia estamos evitando que en el futuro las finanzas o los grandes recursos se vayan a dedicar a temperar estos problemas cuando sean adultos”, concluyó.

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aarl 

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