La Asociación Ganadera Local Especializada en Apicultura y Meliponicultura buscará rescatar e impulsar el manejo de las abejas meliponas en Tizimín, ya que sólo una mujer es productora de miel de esta especie, los demás apicultores tienen poco interés en esta labor debido a que éstas no producen mucho dulce al año, informó el presidente de dicha asociación, Javier Efraín Cuxim Canul.
En lengua maya denominada Xunan kab, Cooleb Cab o Jobom Cab, las abejas meliponas son una especie que carece de aguijón, propia de los pueblos mayas desde hace cientos de años y las denominan abeja sagrada maya por las propiedades curativas de su miel.
Cuxim Canul resaltó la importancia de rescatar esta especie en la región, donde actualmente solo se tiene registrada a solo una mujer dedicada a esta crianza, pues la mayoría de los hombres apicultores maneja la producción de miel apis.
Cuxim Canul dijo que en los últimos años la abeja melipona ha estado colapsando y ha sido catalogada como endémica, ya que factores como el cambio del clima las afecta más que a la apis melífera, además de que muchos productores no están interesados y resultan más rentable las abejas europeas, en cambio, con la melipona beecheii, que sólo produce de un litro a litro y medio al año, para poder vivir con esta abeja se necesita de unos 200 a 300 cajones para cosechar miel y vender en mil 500 pesos el litro, si se trata de números, por ejemplo, 200 colmenas que produzcan un litro por mil 500 pesos al año se obtienen 300 mil pesos, al mes 25 mil y 5 mil pesos semanales, siempre y cuando exista un buen mercado.
Explicó que las personas que se dedican a esta actividad lo hacen por cultura, para que no se pierda y otras con el fin de comercializar y dedicarse de lleno y hacer derivados, con el fin de generar un ingreso.
Destacó que la mayoría de los que trabajan las meliponas en Yucatán lo hacen para preservarlas.
Comentó Cuxim que lo más importante de ambos tipos de abejas tanto las meliponas como las apis es que la pandemia vino a reforzar la idea de uso de la miel, ya que con ambas se empezaron a hacer remedios contra los efectos del COVID-19 y hay un enorme consumo de ambas mieles.
Refirió que, pese a que la producción de miel de abeja melipona es menor, ésta es mucho más beneficiosa que la miel de otras abejas, ya que es sumamente medicinal y ayuda al sistema inmunológico, según estudios, además de que se utiliza para curar dolencias, heridas, quemaduras y enfermedades. No obstante, su uso también es requerido en la rama de la cosmetiqueria para fabricar jabones, cremas y talcos.
Destacó que una colmena de abeja melipona produce un litro o litro y medio de miel al año su proceso de producción es más tratado en comparación con las abejas europeas que producen hasta 30 litros de miel en un año.
Antes se trabajaba en troncos de madera huecos, llamados “jabones” en lengua maya, actualmente se trabaja en cajas tecnificadas. El polen de la abeja melipona tienen un 50 por ciento de valor proteico mayor que el resto de las abejas, ellas son buenas polinizadoras de plantas como achiote, aguacate, café, calabaza, chayote, chile habanero, mango, pepino, sandía, tomate, entre otras plantas frutales.
Recalcó además que hay muy pocos melinopicultores, existen programas que fomentan la crianza y mayormente en beneficio de las mujeres porque no representan peligro, no es una abeja que ponga en riesgo a humanos ni a los animales por su docilidad y las pueden tener en sus patios.
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CC