Después de que los fenómenos naturales como el frío y la sequía ocasionaran pérdidas a los apicultores de Dzemul, Basilio Huch Luna, productor, dijo que ahora están en la expectativa para que dentro de dos meses posiblemente realicen la primera cosecha del año nuevo, pues las lluvias que se presentaron a inicio de año beneficiaron a las plantas con una nueva floración silvestre que daban por perdida.
El sector apícola ha comenzado en estos días a sacar las primeras divisiones a las colmenas que lograron sobrevivir durante el mes de agosto hasta el mes de enero, que fueron los cinco peores meses registrados para los apicultores de este municipio.
Basilio afirmó que la mayoría de sus colegas minoritarios registraron pérdidas completas entre los 40 a 50 colmenas que tenían desde hace cinco años.
El apicultor sostuvo que llevó a cabo de nueva cuenta una supervisión y análisis en su apiario que está a dos kilómetros del poblado, logrando aumentar a seis cajas más de las cuatro que le quedaron en pie, pues aseguró que la floración no provocaría un debilitamiento a las nuevas segmentaciones formadas.
“La lluvia cayó de manera bendecida, ya nos estábamos preocupando por la migración de las abejas por la falta de floración. Fueron los cinco meses donde perdimos dos cosechas buenas de miel”, afirmó.
No obstante, el pronóstico que tiene puesto Basilio, es que dentro de dos meses aproximadamente esté extrayendo miel Dzidzilché, luego de este nuevo florecimiento.
Durante el 2021, indicó que únicamente realizó una cosecha a principios de año generando 12 tambores con 300 kilos cada una, que en total fueron tres toneladas con 600 kilos, lo que fueron comercializados en la Ciudad de Mérida con un precio entre los 48 pesos el kilo de miel convencional.
“Sólo una cosecha buena tuve el año pasado, fue la única porque de las mil 200 colonias que tenía, perdí aproximadamente mil y para recuperar esa cantidad está muy difícil porque años pasaron para poder alcanzarla con mucho trabajo y cuidado”, expresó.
La poca miel que tenía almacenado se gastó por su alto consumo debido en temporada invernal, Basilio aseguró que se vio a la necesidad de recurrir con los productores de la localidad de Cansahcab para comprar 30 litros de producto y poder comercializarlo en la localidad en 200 pesos el litro, pues el alto valor se debía a los escasez que se había producido en la parte Norte del Estado.
“Las personas de la comunidad estaban pidiendo a gritos la miel para su consumo, pero no había; por eso me tuve que ver a la necesidad de adquirirla en otro lado. Se sintió bastante su precio porque muchos estaban acostumbrados a un precio de 80 a 100 pesos el litro, solo por necesidad lo estaban comprando”, subrayó.
Durante el último mes que el productor averiguó el precio del litro de la melada en la Capital Yucateca, estaba en un valor de los 600 pesos el litro de la abeja europea, mientras que el de la melipona o abeja maya, en los mil 700 pesos. El apicultor informó que en las carreteras y en los potreros el Dzidzilché comienza a desprender un olor a miel que hace que miles de abejas empiecen el pecoreo y a llenar los cuadros de miel.
La gran mayoría de las abejas, desde hace 10 días han comenzado especialmente su alimentación de esta planta silvestre, que, para principios del mes de abril, los hará extraer por lo menos 150 a 200 kilos por la pérdida que se registró a finales de año y principios de año nuevo. A pesar de la baja entrada, Basilio optó por no introducir azúcar con agua para que las polinizadoras pudieran sobrevivir, ya que el costal de 50 kilos estaba en un precio de mil pesos, valor alto para el productor que no le garantiza que logren permanecer otra temporada.
“Las abejas tienen que estar acostumbradas al azúcar para que puedan alimentarse, no es lo mismo colocarles azúcar que ellas mismas busquen de las floraciones. Aparte que no había recursos para adquirirlo, por eso la mayoría tuvo pérdidas”, precisó.
Por ello, lamentó el nulo apoyo por parte del Gobierno del Estado en las temporadas más difíciles. “El gobierno que tenemos ahora, es pura promesa. No ayuda, sólo nos perjudica; no nos ayuda para nada, podemos estar perdiendo absolutamente todo y no nos volteara a ver”, sostuvo.
A pesar de inscribirse en el programa “Peso a Peso” en donde los productores podrán adquirir insumos y herramientas al 50 por ciento, el entrevistado alegó que no es lo mismo, pues tarda tiempo en llegar lo solicitado. La única esperanza que tiene el productor es que la floración que hay actualmente logre mantenerse para mediados del próximo mes para que tengan la primera cosecha del año, después de los obstáculos que atravesaron a causa de los fenómenos naturales que golpearon el Estado.
Lo poco que estima recuperar para estas fechas el apicultor es la cantidad perdida durante un año, así como levantar como mínimo 100 colonias, pues los factores climatológicos no son favorables y confiables en estos tiempos. Huch precisó que el precio de la miel convencional actualmente ronda los 50 pesos el kilo, por lo que podría bajar únicamente dos pesos.
Y en dado caso que se registre una seca para el mes de abril a mayo, posiblemente tiendan a cosechar hasta principios del mes de agosto cuando las lluvias que suelen caer en julio generen otra floración, en este caso del Cholul. “Ahora que viene otra seca, las abejas que permanecieron deben tener constante agua en sus pilas, porque si no, eso hará que se terminen de ir por el calor que suele registrarse, además se volvería a utilizar los cuadros y cajas que fueron afectados”, finalizó.
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CC