Decepcionado de la vida porque lo abandonó su esposa e hijo, Luis Alberto C.L., un zapatero de 36 años de edad, se puso a ingerir bebidas embriagantes y luego prendió fuego a su vivienda con el fin de morir calcinado dentro del inmueble.
Sin embargo, el sujeto no contaba con que los vecinos se dieron cuenta de que salía humo de la casa y rápidamente dieron parte a los cuerpos de emergencia.
Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 14:00 horas de ayer, en la calle 14, entre 29 y 31 del barrio de San Juan. Al llegar los agentes municipales, constataron que una densa humareda salía del predio, por lo que dieron aviso a los bomberos, mientras los pobladores intentaban sofocar las llamas con cubetas de agua.
El potencial suicida, al ver que el fuego había tomado fuerza, empezó a pedir auxilio, pero ya el incendio se había extendido e impedía el acceso al lugar.
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Los elementos de la policía y los bomberos tuvieron que derribar la puerta y rescatar al pirómano, quien estaba acostado en una hamaca y cerca de él había varios envases de cerveza.
Los paramédicos le dieron respiración cardiopulmonar (RCP) y le proporcionaron oxígeno, después lo inmovilizaron a fin de trasladarlo al Centro de Salud de esta ciudad, pues a pesar de no haber sufrido quemaduras sí tenía una fuerte intoxicación por el humo inhalado.
Una de las hermanas del individuo comentó a la policía que éste tenía problemas con su pareja, ya que hace unos días lo había abandonado y se llevó al hijo de ambos para irse a vivir al municipio de Akil con otra persona, por ello decidió atentar contra su vida.
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