Ricardo Riquelme y su primo Heisel Valencia, originarios de Xul, comisaría de Tekax, regresaron ayer de San Francisco, California, donde estuvieron trabajando cuatro y ocho años, respectivamente, y después de cumplir con el sueño americano, es decir, ganar lo suficiente para tener una vivienda y sostener a su familia.
Ambos fueron recibidos por sus respectivas esposas, hijos y demás familiares, que portaban cartulinas con mensajes de bienvenida y hasta flores, pero por la emoción y la felicidad que significa el reencuentro, los detalles pasaron a segundo plano, porque lo primero que hicieron fue fundirse en fuerte abrazo con sus respectivas esposas e hijos.
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Los paisanos, que fueron los últimos en abandonar la sala de equipaje, estuvieron a punto de soltar lágrimas por la alegría de volverse a reunir con su familia y ansiosos de llegar a su pueblo natal, porque tenían mucho qué platicar y el deseo de estar sus hogares, por lo que abandonaron rápidamente la terminal aérea para abordar la camioneta que rentaron para trasladarse a Xul, localidad ubicada a unos 20 minutos de Tekax.
Uno de los tíos de Ricardo comentó que afortunadamente a los dos les fue muy bien en el vecino país del Norte, donde ambos estuvieron trabajando arduamente y gracias a que enviaban una parte de sus ingresos a sus esposas, estas lograron comprar una casa y los gastos para que sus hijos pudieran ir a la escuela.
Nos da gusto que hayan regresado sanos y con el deseo de no volver a California.
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NM