Debido a la intensidad de los vientos dominantes, este jueves por la mañana la tripulación del vuelo 201 de Volaris procedente de la Ciudad de México decidió solicitar permiso para desviarse a la ciudad de Cancún.
El vuelo que debió llegar a las 09:14 horas, aterrizó a las 11:30 horas con más de 150 pasajeros, entre los que encontraban un grupo de médicos del grupo Hospital Ángeles que vienen a pasar 56 días en el estado de Yucatán como parte del programa anual de estímulos que la empresa ofrece a sus socios.
Algunos atribuyen a la tripulación la falta de pericia para aterrizar, sin embargo, otros pasajeros indicaron que efectivamente antes de aterrizar sintieron algo de turbulencia y es preferible que los pilotos hayan decidido buscar un aeropuerto alterno y regresar cuando haya mayor seguridad para lograr su objetivo y descender de manera segura en tierra firme la aeronave.
Por cierto, las autoridades de aeronáutica civil, como la misma empresa guardaron total hermetismo sobre este tipo de emergencia.
Pero varios de los pasajeros manifestaron que ciertamente había mucho viento y que la tripulación intentó bajar la aeronave, pero al darse cuenta de que los vientos eran muy fuertes decidieron buscar un aeropuerto alterno y se dirigió a Cancún, donde se reabasteció de combustible para regresar al aeropuerto de esta ciudad de Mérida con un aterrizaje perfecto.
El Dr. Guillermo García Félix que llegó en un vuelo anterior comentó que no está lejano el día en que el grupo Ángeles tenga presencia en esta parte del país y en un “sorpresa” pronto estará por aquí, mientras tanto hoy venimos en plan de recreación por parte de la sociedad médica Ángeles que cada año envía a sus socios a diferentes partes del país y a nosotros nos tocó Mérida que sabemos en un lugar privilegiado.
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GC