Cientos de personas se reunieron minutos antes del amanecer en la playa del centro para participar en el segundo torneo de pesca organizado por la altruista estadounidense, Tanya Sagadraca en el marco del Día del Padre. 32 familias fueron inscritas en donde buscaron tener el pescado playero más grande y pesado, abarcando más de 500 metros de playa.
Varias familias días antes comenzaron a alistarse, practicando con sus cañas y realizando sus camisas para representar a su familia en este evento que logró juntar a más de 300 habitantes más los visitantes que comenzaron a arribar para pasar la jornada dominical en la playa junto a sus familias y consentir ahora a los reyes de la casa.
Para poder buscar a la escama más grande, las personas procedieron a ingresar a las aguas cristalinas como una de sus estrategias, alejándose hasta 10 metros de profundidad en donde estuvieron arrojando sus bocas trampas con carnada, mientras que parte de sus acompañantes estuvieron en la orilla esperando el producto que era capturado, sobre todo la esperanza de traer el pescado más grande.
La emoción de la actividad, hizo que más familias se comenzaran a acercar para presenciar el evento programado para los papás del puerto en donde compitieron por los seis premios. A las 9:00 a.m., las 32 familias comenzaron a arribar a la mesa para buscar el ejemplar más pesado y grande. Al ser la segunda edición de esta actividad familiar, el porteño Andy Canul se llevó por segunda ocasión la victoria, alzándose con una corvina de 1.575, mientras que Gabriel Puc con un ejemplar de 1.040 y Manuel Irola con un pez de 985 gramos.
No obstante, las familias aparte de participar en el torneo de pesca, participaron en la elaboración de esculturas de arena con los pequeños: “Muy bonita y dinámica actividad se hizo, es muy lindo ver a las familias conviviendo en este día muy especial para los papitos”, comentó Matilde Peraza, habitante.
Cabe mencionar que este día comenzó a festejarse en 1910 por parte de la estadounidense Smart Dood, en la ciudad de Washington, sobre todo buscando reconocer ese doble rol que hacía su padre con ella, sin embargo, su propuesta quedó en el olvido. Pero en 1966, el presidente Lyndon B. Jhonson firmó una proclamación presidencial que declaraba el tercer domingo de junio como “Día del Padre”.
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LV