Dueños de restaurantes, locatarios, artesanos y personal turístico acusan a operadores de tours por dar mala imagen del puerto, ya que realizan sus estrategias para ofertar sus paquetes de viaje a otros sitios diciendo que Progreso no es buena zona.
De acuerdo con los diversos grupos de trabajadores turísticos del malecón de Progreso, que prefirieron omitir sus nombres para evitar problemas, una de las grandes debilidades que tiene el municipio como destino turístico se debe a la mala publicidad ofrecida por trabajadores de tours en el muelle de cruceros, dentro de los camiones de transporte y a las bajadas de los mismos, pues insisten en que les compren sus paquetes de viaje a otros destinos del estado.
Los trabajadores turísticos del puerto señalaron que este mecanismo de venta de los operadores de tours se genera a partir de la descalificación del municipio, presentándolo como un sitio sucio, inseguro y sin atractivos, a fin de lograr no sólo la venta de sus productos, sino también las comisiones procedentes de los acuerdos que logran con establecimientos dentro de sus recorridos, sin importarles la mala imagen que ofrecen de la localidad.
Comerciantes coincidieron en que estas prácticas deberían ser erradicadas, considerándolas como mecanismos desleales de venta al afectar de forma directa a los empresarios y trabajadores que laboran en el puerto, señalando que mientras persistan este tipo de actos la situación turística del municipio difícilmente podrá cambiar.
Actualmente, el puerto de Progreso recibe una buena cantidad de paseantes de crucero al año y, la actividad, según autoridades municipales, representa el 15 por ciento de la economía del puerto. Sin embargo, la inversión pública y privada ha ido en incremento en este rubro, llevándose a cabo obras de mejoramiento en la imagen del lugar, junto con proyectos privados que han buscado desde hace algunos años darle al sitio un impulso turístico importante; por desgracia, este tipo de prácticas desleales siguen haciendo mella en los paseantes, a través del comentario de boca a boca que contrarresta los intentos de promoción turística estatal en la materia.