Los habitantes de las comisarías de Nolo y Santa Cruz, ubicadas en Tixkokob, rechazaron la instalación de una segunda granja de cerdos “San Gerardo”, aparcera de Kekén, en el municipio, en la que proyectan criar más de 8 mil animales.
La solicitud de apertura está en proceso ante la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS), y aun cuando su homóloga federal, de Medio Ambiente y Recursos Naturales, informó el viernes pasado, mediante un comunicado, que no autorizará más plantas porcícolas, la población acusa a la empresa de contaminar el agua, generar malos olores y propiciar enfermedades respiratorias, con la primera instalada en el municipio, ubicada en Santa Cruz.
Noticia destacada
Semarnat negará permisos para la operación de las granjas porcícolas en Homún, Yucatán
Los habitantes temen que ocurra lo mismo que en la comisaría de Santa María Chi, en Mérida, donde la granja “San Gerardo” ya contaminó gravemente la zona poblada, por lo que las autoridades la cerraron.
POR ESTO! publicó que, fechado el 24 de enero de 2024, la persona moral “Kikteil”, Sociedad de Producción Rural de Responsabilidad Limitada de Capital Variable solicitó a la SDS la autorización de impacto ambiental para llevar a cabo el proyecto denominado “Granja Porcícola Santa Cruz”, en un predio con tablaje catastral número 731, de uso habitacional, con fecha de cédula 20/04/2023, y folio 2934. Es de clase rústico, ubicado en la comisaría de Nolo, propiedad de Elda Margarita Coldwell Escalante y los heramanos Julio Francisco, Gerardo José y Oswaldo Loret de Mola Coldwell.
De acuerdo con el Instituto de Seguridad Jurídica Patrimonial de Yucatán (Insejupy), creado en el 2011, el Tablaje Catastral 731 tiene título de propiedad número 905, de fecha 24/12/11, emitido por el Notario 15, Alejandro José Monsreal Rodríguez. Cuenta con una superficie de 2 millones 334 mil 952 metros cuadrados, con los siguientes valores: de terreno: 93 millones 398 mil 80 pesos; de construcción: 30 millones 129 mil 782.8 pesos; y catastral: 123 millones 527 mil 862.8.
El proyecto “productivo” tiene capacidad para criar 8 mil 400 cerdos en promedio en siete naves. Sin embargo, la comunidad más afectada es Santa Cruz, donde residen alrededor de 50 habitantes y aproximadamente 20 familias. Esto se debe a su proximidad con la granja que ya opera, la cual cuenta con nueve naves y alberga aproximadamente mil animales cada una, sumando un total de al menos 9 mil.
En un recorrido, POR ESTO! comprobó que un olor nauseabundo intenso emana de la granja. La comisaria municipal, Carolina Sabido Robleda, afirma que la comunidad ya no puede soportar los malos olores, especialmente durante la temporada de lluvias. Debido a esta situación, se opone firmemente a la instalación de una segunda granja, ya que la actual se encuentra ubicada justo detrás de la pequeña comunidad.
El productor Orlando Cruz Kantún, de 70 años de edad y habitante de Santa Cruz desde su nacimiento, explicó que la primera granja está dejando efectos devastadores en la población, pues el olor fuerte es cotidiano, el agua de pozo no puede consumirse ni sirve para bañarse, y hasta tiene la sospecha de que afecta la siembra. Es más, se tomó el tiempo de extraer agua del pozo para demostrar que el olor es a “pescado”. “Si es que San Gerardo quiere construir otra granja aquí al lado no lo vamos a permitir”.
Recordó que en varias ocasiones han pedido a las autoridades municipales que hagan algo para sacar de ese lugar a la granja, pero hasta ahora nadie ha podido contra los Loret de Mola porque dicen que son poderosos y que tienen dinero.
El comisario municipal de Nolo, Juan Eduardo Canché Cámara, aseguró que hasta la comunidad llega el mal olor de la primera planta, y sería peor si ahora instalan otra más en los alrededores de la comunidad, donde viven entre mil 200 y 2 mil habitantes.
Recordó que hace poco los empresarios llevaron topógrafos para hacer mediciones por un pleito que tenían por los límites del cementerio de Nolo. Finalmente, intentando ser generosos, dejaron por la paz el conflicto, pues las tierras de los empresarios llegan hasta detrás del cementerio y se extiende hasta la comisaría de Santa Cruz; la atraviesa hasta llegar por Santa María Chi, donde tienen una granja, ahora ya cerrada.
Santa Cruz, de hecho, está a 9 kilómetros de Santa María Chi, y buena parte del terreno sería utilizado en el nuevo proyecto. Hay un camino de nueve kilómetros que une ambas poblaciones, en mal estado, pero que es transitable en motocicleta y aún en camioneta.
Habitantes de Santa Cruz mostraron a POR ESTO! el terreno donde pretenden levantar las siete naves; es un amplio espacio que hasta hace poco funcionaba como criadero de cerdos bebés, pero que fue abandonado por los efectos del huracán Isidoro, en 2002. Aún se pueden ver los tanques elevados que surgen de agua para bañar y limpiar los chiqueros. Ahí funcionan cuatro naves.
Orlando Aké Kantún, comisario ejidal, quien trabajó en ese lugar antes que el huracán los afectara, dijo que se trataban de cuatro galerones de cría de cerdos y que, en ese lugar, según escuchó, volverán a levantar las siete naves. Es más, comentó que los Loret de Mola tienen mucho dinero y son capaces de meter ingenieros y constructores y levantar todo eso en unos cuantos meses. La versión es que estará lista en noviembre.
Sin embargo, de acuerdo con el trámite que están efectuando ante la SDS, no hay fecha precisa.
Tal como lo confirmó POR ESTO! en el documento de solicitud no se precisa si había una granja anteriormente, lo que podrían estar ocultando a las autoridades.
Mientras tanto el temor empieza a circular en la comunidad de Nolo y en Santa Cruz, las cuales serían las más afectadas por esta empresa con antecedente negativo y vinculada con Kekén, sinónimo de daño al medio ambiente.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
JG