En medio de gritos y empujones, el Congreso del Estado aprobó por mayoría turnar la minuta del Senado en lo referente a la reforma del Poder Judicial de la Federación a la Comisión Permanente de Gobernación y Puntos Constitucionales.
Unos 300 trabajadores del Poder Judicial de la Federación irrumpieron el Recinto Legislativo e ingresaron al "Salón Constituyentes 1918" con la intención de reventar la sesión ordinaria que debía realizarse en calma.
Pero el ruido y el caos protagonizaron el hemiciclo, por lo que el diálogo, la armonía y el respeto perecieron en una sesión que se convirtió en un espectáculo decadente.
Los manifestantes subieron al pleno gritando consignas en contra de la Reforma y tomaron la Mesa Directiva para impedir lo evidente: la aprobación de la minuta.
Los diputados panistas Zazil Méndez Hernández y Rafael Montalvo Mata pidieron a gritos moción de orden y la suspensión de la sesión a la presidenta de la Mesa Directiva, la congresista Neyda Pat Dzul, quien continuó con el orden del día, pese a que la voz se perdió entre los gritos de la turba enardecida que exigió diálogo.
A las 15 horas fueron citados los diputados para continuar con la sesión. A las afueras del Congreso se instalaron toldos en las cuales se apostaron los manifestantes.
GC