Por Ricardo Jesús Rivas
CHETUMAL, 13 de enero.- Aproximadamente 100 internos en el Instituto Nacional de Migración (INM) protestaron para que intervenga Derechos Humanos, para que les den agua para beber y para los baños, así como comida e implementos para la higiene. Se supo que el trato en el interior es inhumano por parte de los trabajadores de migración.
Con relación a los hechos se pudo establecer que aproximadamente a las 7:00 de la noche, por medio del servicio de emergencias 911, elementos de la Policía Municipal de Othón P. Blanco y de la Policía Estatal Preventiva tuvieron conocimiento del reporte de riña en las oficinas de migración, ubicadas en la avenida Prolongación Álvaro Obregón con carretera federal Chetumal–Bacalar.
De inmediato se trasladaron hasta el lugar varios uniformados, quienes al llegar se entrevistaron con el encargado de la guardia del IMN, Carlos Prigada, de 56 años de edad, quien manifestó que los inmigrantes se encontraban inconformes por la atención de uno de sus compañeros, además de que no querían que los regresaran a su país, por lo que los policías preventivos dialogaron con los inconformes y se tranquilizaron.
Sin embargo, posteriormente, poco antes de las 9:00 de la noche, por medio del servicio de emergencias 911, se reportó de nueva cuenta un auxilio en las instalaciones de migración.
Cuando llegaron los policías se entrevistaron con el guardia de la puerta, quien señaló que aproximadamente a las 8:00 de la noche, se acabó el agua y no había para que se bañen, por lo que se comportaron agresivos. Por fortuna, un camión cisterna del Heroico Cuerpo de Bomberos llegó al sitio y abasteció del vital líquido a la dependencia, quedando atrás el disturbio.
No obstante, se supo que los baños de la dependencia no cuentan con agua potable, por lo que los indocumentados no pueden bañarse, además de que se encuentran llenos de heces fecales. De la misma forma, no les dan de comer y el trato es inhumano.