De la Redacción
CHETUMAL, 18 de marzo.- Agentes de la Policía Ministerial privaron de la libertad a un ciudadano en calles de la colonia Las Casitas. Al ser detenidos, detrás del estadio José López Portillo, los ministeriales se encontraban encapuchados y alegaron que se trataba de una supuesta investigación. También confesaron que no tenían orden de aprehensión, además, culparon a los policías que los detuvieron de hacer escándalo y les reprocharon su fallida intención.
Al filo de las 11:00 de la noche, las autoridades tuvieron conocimiento de una privación ilegal de la libertad en el cruce de las avenidas Andrés Quintana Roo y Venustiano Carranza, por lo que autoridades policiales de los tres niveles de gobierno acudieron de inmediato hasta el sitio.
Al llegar, varios ciudadanos señalaron que una camioneta le cerró el paso a un vehículo Chevrolet tipo Spark de color azul, de donde se bajaron sujetos encapuchados y se llevaron al tripulante junto con el automóvil.
Simultáneamente, varias unidades de la policía realizaban la búsqueda de la camioneta que describían los testigos, quienes intentaron seguir a los plagiarios lográndolo únicamente por dos cuadras.
Sin embargo, la camioneta fue vista introduciéndose hacia el estadio José López Portillo, acudiendo las unidades y al darle alcance obligaron a descender a los tripulantes, quienes dijeron ser agentes de la Policía Ministerial.
Al ser identificados, uno como el agente Buenfil Cervera, dijeron que realizaban una investigación; sin embargo, confesaron que no tenían orden de aprehensión, y varios policías criticaron que el detenido no estaba esposado, sino encintado de pies y manos.
Pese a lo anterior, Jorge Arjona Basto, subdirector operativo de la Policía Municipal, en un torpe intento por encubrir a los ministeriales y violentando la libertad de prensa, ordenó alejar a los reporteros de esta casa editorial.
Al final, la privación de la libertad quedó impune gracias al contubernio del mando municipal con los agentes ministeriales.