CITILCUM, Izamal, Yuc., 7 de julio.- Dos lesionados y gastos materiales estimados en miles de pesos fue el saldo de un accidente carretero que ocurrió sobre la vía Izamal-Mérida, a la altura del entronque de Citilcum.
Los hechos se registraron alrededor de las 6:15 de la tarde, cuando el señor Carlos Novelo conducía una camioneta Chrysler, color plata, placas YYC-214-A.
Dicho conductor, con domicilio en Cenotillo, viajaba en convoy con otros vehículos de la misma localidad. Minutos antes del accidente las unidades se retiraron de Citilcum y al llegar al entronque mencionado, los que iban adelante realizaron su alto obligatorio.
Los conductores, al ver que no circulaba ningún automotor, salieron para tomar la carretera estatal rumbo a Izamal, pero el chofer de la camioneta Voyager se confió y siguió a sus compañeros.
Sin embargo, al salir fue colisionado brutalmente por una camioneta Ford, negra, placas YN-067-4-A, que era guiada por José Asunción Chan Gamboa, quien se dirigía a Mérida.
La camioneta Chrysler fue golpeada en la parte izquierda trasera, dio medio giro y fue aventada al otro costado de la carretera, mientras la Ford dio un giro completo y quedó en posición opuesta a como circulaba.
El conductor de la Chrysler, al ver lo que provocó, se dio a la fuga, dejando a su familia para que resuelva la situación.
En la citada camioneta viajaban varias personas, pero la señora Alejandra Burgos Contreras, de 42 años de edad, resultó lesionada, por lo que fue trasladada al hospital del IMSS de Izamal en la ambulancia 21-PC, a cargo del Director de Protección Civil, Pedro Pablo Lugo Ruiz.
Los demás ocupantes estuvieron estables, únicamente se llevaron un tremendo susto.
En la camioneta Ford, el menor J. C. P., de apenas tres meses, fue trasladado por los paramédicos de la ambulancia Y-5 de la SSP, al mando de Oscar Puga y Víctor Canché, al hospital de Izamal para su valoración médica y lo acompañó su mamá, señora Emma Carolina Pat Pool, con domicilio en Umán; los demás resultaron sólo policontundidos.
Al lugar llegó la Policía Municipal al mando del Comandante Oxté y Ricardo Lavadores. También arribó la unidad 6666 de la Secretaría de Seguridad Pública, al mando del oficial Diego Baeza, quien se hizo cargo de los trámites correspondientes. Los vehículos quedaron con los hierros retorcidos, a un costado de un nicho.
(David Collí)