Ayer jueves por la mañana, un sujeto que estaba endosando un cheque en una de las mesas de entrada del banco BBVA, ubicado en Prolongación Montejo con calle 17 de la colonia México, se le salió el arma de la mochila tipo canguro y cayó al suelo, luego el individuo recogió el arma, cambió el cheque y se retiró.
Un cliente del banco que conoce de armas y que circunstancialmente se encontraba en el lugar identifico la pistola como una Smith & Wesson tipo escuadra, abastecida, con un tiro en la recamara, pero con el seguro puesto, quien describió al sujeto de entre 35 a 40 años de edad, que vestía de guayabera blanca y pantalón color beige, corpulento, con aspecto de militar o escolta, que dijo: “se cayó lo que no deberían ver”, levantó el arma, la guardó en la mochila, cambió el cheque y se retiró.
La acción fue fugaz, pero no pasó desapercibida porque el ruido del acero rebotando en el suelo llamó la atención de los clientes y del personal del banco, al parecer se activo algún sistema de alarma silenciosa, porque poco después llegó el moto-patrullero GM-2267 de los GOERA Motorizados de la Secretaría de Seguridad Pública; el moto-patrullero MT-1141 del agrupamiento Aguilas; dos carro-patrullas y la patrulla 6627 de dicha corporación; de la ultima descendió un mando que se encargo de dirigir las acciones y entrevistar a la gerente de la sucursal bancaria.
Al parecer el asunto no pasó a mayores, porque relativamente poco después los uniformados se retiraron y no requirieron revisar los videos de las cámaras de circuito cerrado del banco, donde seguramente la imagen del empistolado quedó grabada cuando cambió el cheque.
Sin embargo, queda la constancia de que gente armada entra a los bancos y no son detectados, sin menospreciar el riesgo de portar armas abastecidas, que por un descuido se puedan accionar al caer al suelo y que una bala perdida lesione o le arranque la vida a una persona; sería importante conocer la identidad del individuo.
(Fernando Poó Hurtado)