El Juez Primero de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida, Lic. Antonio Bonilla Castañeda, declaró ilegal la detención de dos jóvenes que a principios de la presente semana fueron reportados como desaparecidos y que en realidad estaban detenidos por delitos contra la salud. Ayer mismo se les concedió la inmediata libertad.
Se pudo observar a familiares de los jóvenes Julio César R. G. y Monserrat R. P., a las puertas de la sala 6 del Centro de Justicia Oral, rezando por ellos y al verlos salir estallaron en llanto, los abrazaron y se arrodillaron en el piso por varios minutos para agradecer a Dios su liberación, tras 4 días presos en distintas celdas, primero en los separos de la Secretaría de Seguridad Pública, después en la Fiscalía General del Estado y por último en el penal de Mérida.
Ayer por la mañana los dos jóvenes de 21 y 23 años de edad fueron puestos a disposición del Juzgado Primero de Control, donde se les formularía cargos por delitos contra la salud en su modalidad de posesión de marihuana con fines de venta.
Sin embargo, ante las inconsistencias detectadas en la carpeta de investigación, el Juez acordó dejarlos libres y declaró ilegal su detención.
Se expuso que sin el consentimiento de ellos y sin que estuviera presente un defensor, se les practicó exámenes toxicológicos y de alcoholimetría, este último sin que estuvieran manejando, según el informe oficial.
Según averiguaciones, agentes de la Policía, entre ellos una mujer, realizaban labores de vigilancia el pasado lunes a las 17:00 horas, a bordo de un vehículo de la corporación.
En un momento dado al caminar por una calle se acercó un sujeto que les informó que cerca de allí vio a dos hombres y una mujer en una operación de comercio de droga, no obstante, el supuesto testigo no dio su nombre ni tampoco firmó la entrevista.
Al acudir al sitio en la patrulla en movimiento a unos tres metros, observaron que estaban dos jóvenes y que uno metió en la cajuela de un auto unas bolsitas con marihuana, por lo que se dio aviso al Ministerio Público y se les sometió a revisión. Encontraron bolsitas con droga y fueron trasladados a la cárcel pública.
Los imputados negaron los cargos y señalaron que esa tarde transitaban a bordo de un vehículo sobre la avenida García Lavín y a la altura de City Center fueron detenidos por un vehículo oficial y un moto-patrullero que los inspeccionó y quitó las llaves de su departamento al que supuestamente acuden y llevan diversos objetos.
Después quedaron detenidos. La madre de la menor exhibió capturas de pantalla en el que se aprecian los mensajes y conversaciones con su hija y el último contacto con ella en el que le decía que ya estaban cerca de la plaza Magnum donde iban a jugar boliche y nunca llegaron a la cita.
Al declarar el Juez como ilegal la detención, señaló que no hay registro del supuesto testigo, no fueron detenidos en flagrancia al no haber el supuesto comprador o sea no había intercambio.
Se declaran nulos los exámenes toxicológicos y de alcoholimetría practicados sin el consentimiento de los imputados y sin la presencia de un defensor, así como también se pone en duda la cadena de custodia de los presuntos narcóticos ocupados.
También se indica que los policías al estar actuando ya bajo la indicación del Ministerio Público, no tenían por qué llevar a los detenidos a la Secretaría de Seguridad Pública donde los retuvieron por cinco horas y después los pusieron a disposición de la autoridad investigadora.
Ante las inconsistencias detectadas se declaró ilegal la detención y se les concedió la inmediata libertad.
(Armando Gamboa Romero)