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Yucatán / Sucesos

Más de 60 hectáreas arrasadas por el fuego

CANDELARIA, Campeche. – A pesar de que el pasado sábado 11 de abril brigadas voluntarias de la cabecera municipal y de la localidad de Pejelagarto, realizaron labores y controlaron presuntamente el incendio en la reserva forestal de la tercera ampliación de esta localidad, por intensas temperaturas el fuego se reavivó y hasta ayer había consumido más de 60 hectáreas.

La reserva forestal con una superficie de más de 1,400 Hectáreas de selva virgen con árboles de hasta 100 años de antigüedad que se encuentra en peligro y amenazando a la biodiversidad de especies tanto maderables como de fauna silvestre y aves que ahí, tienen su hábitat.

Brigadas de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) provenientes de la ciudad de Campeche y del municipio de Escárcega, se han abocado a realizan actividades para tratar de impedir el avance del fuego con brechas corta fuegos.

E incluso tuvieron que derribar algunos árboles ya dañados por el fuego que en cualquier momento podrían colapsar para evitar que pudieran caer y propiciar el avance fuera del cerco cortafuego que están realizando para controlar el incendio y finiquitarlo.

Sólo un pequeño grupo de voluntarios del poblado, apoyan a las brigadas de CONAFOR y hacen frente a este incendio, por lo que los esfuerzos de autoridades y ambientalistas que en junio del año pasado lograron frenar el ecocidio que trataban de llevar a cabo los ejidatarios de Pejelagarto, pues trataban de talar esa reserva forestal.

Hoy el fuego amenaza con acabar con esa Reserva denominada “Las Ruinas” por algunos montículos con vestigios mayas que existen debajo de esa selva de enormes árboles, en la que autoridades municipales habían proyectado conservarlo como un parque ecoturístico.

Es preciso señalar que a pesar de que se les ha pedido el apoyo a los ejidatarios para apoyar en las labores en el incendio forestal, éstos, se han negado, lo que para muchos vecinos de ese poblado es considerado como sospechoso.

Señalan que, podría ser que los mismos ejidatarios dolidos por la intromisión de grupos ambientalistas y autoridades, hayan propiciado el siniestro que amenaza con salir de control por los intensos calores o altas temperaturas que se han dejado sentir en esta región.

(Texto y fotos: POR ESTO!)

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