El esposo de una mujer de 31 años de edad la encontró suspendida del cuello en su domicilio ubicado en la calle 21 entre 14 y 16 del municipio de Tepakán, hecho con el que la entidad suma 137 decesos autoprovocados en lo que va hasta esta segunda quincena del décimo mes del año.
De acuerdo con datos obtenidos, Francisco P.M., de 56 años de edad, fue quien se llevó la desagradable sorpresa cuando regresó de comprar. Al entrar a la vivienda vio el cuerpo de Librada Concepción K.B. que pendía de una cuerda atada a un hamaquero.
Ante la desesperación la bajó, la colocó en el piso para tratar de salvarla, pero no reaccionaba, así que solicitó ayuda a través de los números de emergencia. Acudieron elementos de la Policía Municipal, junto con paramédicos, pero estos últimos nada pudieron hacer por la mujer.
Luego de escuchar la versión del esposo de la víctima y delimitar el predio hicieron el reporte a las autoridades estatales. Tiempo después arribaron oficiales de la Secretaría de seguridad Pública (SSP), quienes tomaron nota, mientras llegaban representantes de la Fiscalía General del Estado para iniciar las averiguaciones.
Se encargaron de recopilar información y recopilar evidencias para corroborar que se no se tratara de algún hecho delictivo e integrar la carpeta de investigación. Concluida su labor, personal del Servicio Médico Forense (Semefo) se encargó de las labores para el levantamiento del cuerpo. Lo trasladó a sus instalaciones para la autopsia de ley que permitirá determinar la causa exacta del deceso y complementar el expediente.
Las muertes de mujeres por suicidio continúan aumentando en Yucatán, pues con el hecho de ahora suman 30 los casos. Los meses que han registrado más muertas por lesión autoinfligida son enero, con cinco; abril, siete y julio, cuatro. Llama la atención que los decesos juveniles con menor rango de edad por esa causa son de mujeres de 11 a 13 años de edad.
Suspensión, más frecuente
Durante la última década se registró un notorio aumento en las muertes por suicidio en mujeres. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el 2014 se registraron 181 suicidios, 28 de mujeres. De ellos 25 fueron por la vía de la suspensión y tres por envenenamiento.
La cifra más negativa fue en el 2015, cuando hubo 45 decesos de mujeres por suicidio. Ese año la cifra total de estas muertes fue de 190, de las cuales 35 fueron mujeres que se ahorcaron, cinco se envenenaron, una se privó de la vida con un disparo y otras por causas diversas.
En el 2016 las muertes autoinfligidas de mujeres disminuyeron a 35, aunque los números de ese problema de salud pública aumentaron a 224. De la cifra de mujeres fallecidas, 29 fueron por suspensión, cinco por envenenamiento y una por mediante otra causa.
Durante el 2017 se quitaron la vida 39 mujeres. De ese total, 32 se ahorcaron, dos emplearon un arma de fuego y una se envenenó. Ese año hubo un total de 191 suicidios.
Luego, en el 2018 la situación continuó agravándose para las mujeres, cuando los reportes estadísticos federales indicaron que 40 mujeres se quitaron la vida, pero el 80 por ciento lo hizo por ahorcamiento, 32 víctimas femeninas. Las restantes ocho ingirieron alguna sustancia nociva.
A lo largo del 2019, marcado por 245 suicidios, también sumó una cantidad mayor de fallecimientos de mujeres por suicidio. De ese total 47 fueron mujeres, de las cuales 39 se ahorcaron, una empleó un arma de fuego y otras siete optaron por el envenenamiento.
Estadísticas del Inegi
El 2020, año de la pandemia de Covid, los suicidios de mujeres se incrementaron a 59, de las cuales 51 casos fueron por ahorcamiento. Los restantes ocho casos fueron por envenenamiento y causas no especificadas por el Inegi.
Al año siguiente, el 2021, la pandemia se agravó y lo hizo también el número de muertes autoinfligidas de mujeres y la cifra alcanzó los 61 casos, el doble que se registró en el 2014. Ese año fue el que mayor número de víctimas por esa causa registró, con 340 y fue la primera vez que se documentaron más de 300 casos en la historia de los registros de esas muertes.
En el 2022 y 2023 se registraron cifras por encima de las ocurridas en el 2021 de suicidios de mujeres, con 61. El 2022 finalizó con 366 muertes. Empero, durante ese período 61 mujeres se quitaron la vida, la segunda cifra más alta en la última década. En ese negro calendario, 50 se ahorcaron y 11 se envenenaron.
Otra estadística trágica ocurrió en el 2023 con los suicidios de 341 habitantes de Yucatán, de los cuales 56 fueron mujeres. Los números de fallecimientos también indicaron que el ahorcamiento fue la causa de muerte con mayores cifras, con 49, siete fueron por envenenamiento y causas de las que no se tuvo conocimiento.
Según datos de la misma institución, los decesos de mujeres registrados a lo largo de nueve meses y 22 días de este 2024, de las 30 mujeres que se han privado de la vida por suspensión, tres lo hicieron por envenenamiento, tomar medicamentos o sustancias tóxicas como ácido muriático. En la última década, 504 mujeres se han quitado la vida en Yucatán.
