Ejidatarios defienden su patrimonio

Compañías desconocidas quitan tuberías de un gasoducto y se las están llevando sin su consentimiento

BECAL, Calkiní, Cam., 19 de diciembre.- Un recurso que debe ser destinado para los ejidatarios, por la colocación de tuberías del gasoducto que atraviesa por 8 kilómetros el ejido de Bécal, están al aire ante la negativa de pagar a los hombres de campo, pero una empresa se encuentra retirando toda la tubería sin aviso previo.

Decenas de hombres y mujeres pertenecientes al ejido de Bécal, acudieron a la orilla de la carretera federal Campeche-Mérida, donde frenaron dos maquinarias que sacaban todas las tuberías del gasoducto.

Las autoridades ejidales de Bécal han realizado mal sus funciones, ya que han hecho convenios con empresas de las cuales se desconocen de qué empresas son, sin embargo hicieron convenios detrás del ejido de Bécal.

Los ejidatarios no están de acuerdo debido a que el comisario César Augusto Uc Ché no debió de hacer esta acción a espaldas de los ejidatarios, ya que debe ser una persona honesta por la autoridad que representa al ejido.

Sin embargo, Uc Ché hizo caso omiso a sus atribuciones, así como lo hizo el Consejo de Vigilancia y una persona más de nombre Santiago Pérez, quien no da la cara ante el ejido, ya que en el ejido hay muchas anomalías, como el equipo de sonido que se encuentra en casa del tesorero, cuando debe estar en la comisaría ejidal porque pertenece a todos los ejidatarios.

Las tuberías que se extraen son de Pemex, fueron puestas hace aproximadamente 40 años, pero ahora llegaron empresas fantasmas que las están llevando sin conocimiento de los ejidatarios, por eso se realiza este movimiento para rescatar lo que pertenece a los ejidatarios de la comunidad de Bécal.

Un aproximado de 50 pesos por metro debería ser el pago por lo ocupado por la tubería, lo que significa que son 50 mil pesos por cada kilómetro que se ocupa de las tierras ejidales, de lo cual serían 8 kilómetros, lo que estaría sumando 400 mil pesos por el espacio ocupado.

Cabe señalar que no sólo debe ser la inconformidad de los ejidatarios, sino también debe ser perseguido por las mismas autoridades, debido a que se comete un delito por parte de las empresas que trabajan en esta extracción de tuberías, ya que no se hizo ningún convenio directo con los ejidatarios para entrar a remover las tuberías.

Así también las autoridades ambientales del Estado de Campeche deben estar pendientes de estos trabajos, ya que se ha destruido una gran cantidad de monte al derribarse miles de árboles a su paso, por lo que estarían cometiendo un delito.

Se podría presentar una demanda ante este tipo de acción que realiza la empresa de la cual se desconoce de quien sea el dueño y el nombre de dicha empresa, sin embargo por el momento solo se está pidiendo que pague a los ejidatarios.

Por ello se tomó la decisión de retener las maquinarias para que pueda cumplir la empresa su parte, ya que quedaron de enviar los recursos para los ejidatarios pero simplemente no cumplieron el compromiso, por lo que dejaron mal a los ejidatarios y solo fueron engañados de que se les entregaría los 400 mil pesos por los 8 kilómetros de tierra ocupada.

De la misma forma, los ejidatarios indican que a su paso de destrucción al medio ambiente, también se han destruido cuyos y extraído piedras labradas, por lo que también el INAH debe intervenir en este problema, realizar las averiguaciones correspondientes y aplicar la ley.

Los labriegos dijeron que se mantendrán firmes ante esta situación y no cederán hasta que la empresa cumpla su compromiso de pago de 400 mil pesos que es la cantidad que suma los 8 kilómetros de tierras ejidales que se están ocupando.

(Jorge Aké Gutiérrez)