Inició un nuevo periodo de clases y los alumnos del jardín de niños “Carolina Azcárraga García” cumplirán un año de tomar clases en un centro religioso prestado, debido a que la obra del plantel, a cargo de la empresa Provesuministros S.C ligada al priísta dos veces perdedor José Antonio “Lolis” del Río, no ha podido entregar la obra, que debió culminar en mayo del 2018.
La constructora priísta debió empezar los trabajos desde el 26 de diciembre del 2017, de acuerdo a lo estipulado en el acta de fallo del concurso que le adjudicó el Instituto de la Infraestructura Física Educativa del Estado (Inifeec); la obra tendría una duración de 157 días, sin embargo, a la fecha no se ha podido entregar.
Al respecto, la directora del plantel, Laura Graciela del Rivero Carrillo, declaró que presuntamente en enero se pasarían al plantel “ya terminado” a tomar las clases de forma normal, pero no hay una fecha estipulada, y este 29 de enero cumplirán un año de haberse salido del recinto para laborar en un centro religioso.
“No sabemos a qué se debe el retraso, tengo información de las autoridades de que están trabajando, pero no sé por qué no nos han dicho, y los padres están preocupados y desesperados, y también nosotros como personal docente, porque es incómodo trabajar de esta manera”, enfatizó.
Agregó que la instalación al ser prestada, es usada constantemente por los feligreses, y por ello no pueden hacer adecuaciones a la estructura, para pasar los calores o reforzar la seguridad.
“La remodelación del kínder era necesaria, tuvimos inundaciones, se demolió la escuela, pero queremos que se entregue pronto, tenemos 187 niños en 7 grupos que requieren mejor atención, buscamos la forma de hacer las actividades físicas, los Honores a la Bandera, y es muy difícil”, apuntó.
La directora señaló que los niños se ponen inquietos, se mezclan los grupos, hay mucho bullicio, eco, es tedioso, pero las docentes han puesto todo de su parte para sacar adelante la educación de los menores.
La obra tuvo un costo total de 9 millones 520 mil 767 pesos, de acuerdo a la licitación LO-904032998-E18-2017 y hasta el 8 de agosto del 2018 ya se había pagado más de la mitad, pues el Gobierno habría dado 6 millones 014 mil 125 pesos, en los que se incluye la demolición, reconstrucción, adecuación y compra de mobiliario educativo.
Asimismo, días antes del regreso a clases en enero del 2018, personal de la Secretaría de Educación del Estado (Seduc) solapó que los trabajadores de la constructora presionaran a los padres de familia para desalojar la escuela, y éstos apresurados, vaciaron la escuela y el mobiliario lo guardaron en su mayoría en domicilios particulares.
La obra debió terminar el 30 de mayo del 2018, pero en ese entonces apenas empezaban los trabajos, y ahora aún no se sabe hasta cuándo será entregada, además, fuentes internas del Partido Revolucionario Institucional revelaron que la empresa Provesuministros S.C sólo participó en la licitación para obtener recursos para las campañas electorales y apoyar a todos los priístas perdedores.
Y mientras el maquetero Alejandro Moreno Cárdenas ha invertido millones de pesos en publicidad oficial y “texto-servidores” que hacen la vista gorda al dinero desviado, el sector educativo, de seguridad y salud, siguen padeciendo los malos manejos de los priístas que sólo buscan favorecerse.
A la fecha el secretario de Educación, Ricardo Medina Farfán, catalogado como uno de los peores titulares de la Seduc por su falta de capacidad para cumplirles a los padres de familia con garantizar una educación de calidad, no ha brindado declaraciones al respecto de esta obra irregular y atrasada.
(Texto: Dayana Alcalá /
Fotos: Carlos Valdemar)