Manuel Pérez Cevallos, lleva más de 40 años vendiendo pozol y dulces típicos, aseguró que espera con alegría el Día de Muertos y los días que lo acercan más a la fecha porque siempre levanta sus ventas en el interior del Mercado Público “Alonso Felipe de Andrade”.
Cada determinado tiempo que llega por ejemplo, el Día de Muertos, “ya van dos años que nos sacan a la transición y primer día que nos estamos poniendo hoy”, aseguró el entrevistado.
Tradiciones
Las costumbres locales y conservar las tradiciones, ha mantenido viva a la familia de este comerciante que sigue vendiendo después de varias décadas en los pasillos del centro de abasto.
“Pues nos va un poco regular, el hecho de que se avecina Día de Muertos sí nos ayuda bastante en las ventas, apenas está empezando a acercarse el día mayor”.
Comentó que reciben más clientela durante los días 1 y 2 porque en los rezos se ofrecen dulces típicos también, además siempre buscan variedad de productos para poner en el altar y generalmente lo dejan para el mismo día.
Variedad
“Vendemos una gran variedad de dulces artesanales tradicionales, por ejemplo, la papaya, la calabaza, pulpa de tamarindo, el dulce de nance, de tejocote, de ciruela, apenas estamos empezando”.
El comerciante también vende otros productos tradicionales de la región, pero comenta que por estas fechas la demanda es por los dulces y manjares que los lugareños compran para ponerles en el altar a sus fieles difuntos, durante la celebración del Día de Muertos.
(Texto y fotos: Redacción / POR ESTO!)