Continuando con las tendencias de 2017 y 2018, alrededor de 30 tiendas cerrarán sus puertas a principios del 1 de enero del 2020, al declararse en bancarrota ante la falta de subsidios y la eliminación de créditos a favor del sector de los micros comercios, advirtió María Candelaria González Cajún, presidenta de la Federación del Pequeño Comercio del Estado de Campeche.
“Más del 50 por ciento de los pequeños comercios que hay en las colonias populares se encuentran en la informalidad, y es que por cada cinco negocios formales hay 15 informales, señaló que la culpa es de la Secretaría de Hacienda por poner en marcha programas fallidos que lesionan la economía de los que menos tienen”, expresó.
Señaló que aunque existen programas de financiamientos enfocados a los micros, pequeñas y medianas empresas para fomentar la economía del sector como son Bancampeche o los proyectos de crédito de la Secretaría de Fomento Industrial y Comercial (Sedeco), los han apoyado, sin embargo con las altas tarifa de electricidad, el alza de los impuestos y la bajas ventas han obligado a muchas personas cerrar definitivamente sus negocios.
“Desde el 2004 la deserción económica que se vive a nivel nacional ha lacerado gravemente al sector comercial, ya que las administraciones han dejado prácticamente a México sin subsidios y con deudas masivas en comparación de las grandes cadenas comerciales, contrabajo podemos subsistir los comerciantes, quienes nos hemos visto afectados con la competencia desleal de los supermercados y del comercio infantil, lo que ha obligado a cerrar negocios de más de 50 años”, apuntó.
Detalló que en precariedad viven las tiendas y abarrotes, ya que en su mayoría son atendidos por personas de la tercera edad que contrabajo subsisten de una pequeña pensión que han logrado obtener durante los años de trabajo pero no es suficiente para que puedan tener una vejes digna.
“No podemos decir que haya una extinción como tal, sin embargo, nos coloca en números rojos por las bajas ventas, si bien es cierto que hay más apertura, la deserción los obliga a ser esporádicos pues no pueden solventar los gastos y pagos de impuestos, desafortunadamente no hay apoyo ni solvencia económica para cubrir las necesidades de la población”, subrayó.
Enrique Flores Sánchez, dueño por más de 20 años de una tienda abarrotes en las Flores, declaró al Por Esto!, que siendo una persona de la tercera edad la mayor parte de su pensión está invertida en su negocio, para que pueda tener un mejor sustento.
“En los últimos años las ventas han ido a la baja, contrabajo sale para el pago de luz, agua, y predial, más ahora con los cambios de leyes que quieren implementar impuestos a casi todo, y cuando vas a pedir apoyo al gobierno te cierran las puertas, en comparación de otros negocios que adeudan por años sus impuestos pero por ser familiares de funcionarios públicos pasan desapercibidos, no hay justicia pero tenemos que buscar la manera de sobrevivir porque con lo que logramos vender tenemos mínimo para comer”, apuntó.
Juan Esteban Sánchez, señaló que este es un negocio familiar de más de 30 años, donde él ayuda a su abuelita ya que es su sustento de vida, pero ante la crisis económica y las bajas ventas, ellos se han visto en la necesidad de mucha veces tener que regatear el producto porque no pueden subirle para mantener a sus clientes, sin embargo compran los básico como son galletas, jugos, refrescos o algunas carnes frías, pues la mayoría prefiere hacer su despensa en los supermercados y las tiendas de abarrotes son complementarias”.
En este mismo sentido, Alejandro González Sánchez, de oficio bolero por más de 10 años, expresó la falta de interés de las autoridades locales los ha orillado a tener que despedir a sus colaboradores por la falta de ingresos.
“Antiguamente los mercados eran la central de abastos de la población, así como el punto de reunión de las familias, pero poco a poco estamos siendo desplazados alegando que damos mal aspecto al turismo, pero no reconocen que con lo que generamos sacan sus buenas tajadas en el Ayuntamiento, no nos dan la importancia que merecemos para la economía local además que nos ponen trabas cuando solicitamos algún financiamiento, necesitamos apoyo de las autoridades ante las precarias en las que nos encontramos”, argumentó.
(Karina Gómez)