Aunque fueron presentadas desde el pasado 19 de noviembre, el Congreso del Estado aplazó la lectura de las leyes de Ingresos y del Presupuesto de Egresos para el 2020, cuyo motivo se desconoce, permaneciendo actualmente los referidos documentos en manos de las comisiones legislativas correspondientes.
El Congreso del Estado mantiene total hermetismo sobre la iniciativa de Ley enviada por el titular del Poder Ejecutivo, cuyo monto asciende a 21 mil 074 millones de pesos, lo que representa un crecimiento de 3.9% comparado con el del 2019; sin embargo, la medida de austeridad ha generado inconformidad entre los legisladores al “apretarles” en sus gastos corrientes y bonos, así como a organismos como el Instituto Electoral del Estado.
El desacuerdo entre los grupos parlamentarios, que consideran que el titular del Ejecutivo Estatal ha tomado demasiado en serio la medida de austeridad republicana, los ha llevado a aplazar la lectura de la Ley de Ingresos y Egresos en el pleno, al pretender realizar reajustes en rubros que atentan contra sus ingresos, entre ellos la desaparición de partidas discrecionales como el rubro de “apoyos sociales”.
Otra de las medidas de austeridad que no tiene contentos a los legisladores locales es la reducción del presupuesto del IEEC, lo que impactaría en sus prerrogativas, por lo que han iniciado una serie presiones hacia el propio titular del Ejecutivo Estatal para “ablandar” su medida de austeridad, de lo contrario los legisladores se quedarían sin sus bonos.
El año pasado, el Congreso del Estado dio lectura a la iniciativa de Ley de Ingresos y Egresos el 21 de noviembre; en el caso de Campeche, tras la aprobación del Presupuesto Federal por la Cámara de Diputados, el Congreso del Estado ya debió pasar a lectura al pleno la propuesta.
Fuentes cercanas al Poder Legislativo señalan que la propuesta del gobernador Carlos Miguel Aysa González va orientada a fortalecer rubros de infraestructura, salud y educación, y se aplica la austeridad en el resto de los organismos e instituciones, a quienes se les pidió incluso cancelar programas innecesarios.
Al Congreso del Estado se le retiró desde el mes pasado los apoyos de gestión social, que a cada legislador le significa un importante fuente de ingreso, hecho que habría causado enojo, por lo que han solicitado “ablandar” la medida de austeridad.
En la administración del ex gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, pese a que en papel se contemplan las medidas de austeridad, en la práctica se siguió con el gasto discrecional de los recursos públicos, lo que no ocurrirá en esta ocasión siguiendo los lineamientos del Gobierno federal.
Como suele ocurrir, la interpretación que se ha dado en los corrillos políticos es que, puesto que para el año próximo se ha previsto un gasto histórico para Campeche, es probable que, con el apoyo del Legislativo (o lo que es lo mismo: Ramón Méndez Lanz), el ex gobernador acusado de corrupción Moreno Cárdenas pretende seguir metiendo mano al presupuesto de Campeche.
(POR ESTO! Campeche)