Los principales representantes de la clase política campechana, vinculada al PRI-Gobierno en una Entidad controlada desde hace años por este instituto político, se volcó en defensa del ex Gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, hoy investigado por la Fiscalía General de la República (FGR) por presunto enriquecimiento ilícito y la adquisición de millonarios inmuebles que NO corresponden con su carrera como servidor público.
Desde el presidente del Congreso local, Ramón Méndez Lanz, pasando por el Alcalde espurio de Carmen, Oscar Rosas Gonzáles, y el Gobernador sustituto, Carlos Miguel Aysa González, todos minimizaron los señalamientos hechos por propios grupos priistas y que de nueva cuentan manchan a su partido, el PRI, como una fábrica de gobernantes que de la noche a la mañana se convierten en millonarios por usufructuar con los recursos públicos.
Achacaron las acusaciones a una supuesta vendetta política, pues afirman que “Alito” se ha convertido en una “amenaza” desde la dirigencia de su partido, pese a la intrascendencia cada vez más evidente de lo que se haga o no desde el PRI nacional, en un ambiente político nacional que ha castigado a este partido y a su aliado de facto el PAN, por su régimen “prianista”.
Ramón Méndez Lanz, presidente de la Junta de Administración y Gobierno del Congreso del Estado, presumió el proceso de elección del fiscal anticorrupción señalando que es importante combatir la corrupción en el Estado, pues dijo que es un tema sensible, “un tema en que todos los entes públicos, todos los poderes estamos trabajando en ese tema”.
En ese tenor se le cuestionó por las acusaciones precisamente contra Moreno Cárdenas quien recientemente abandonó la Entidad, y el único de los candidatos a dirigir el PRI que tuvo a su disposición las arcas de un Estado empobrecido.
Titubeante, Méndez Lanz lo eximió de culpas, “cuando empieza este tipo de ataques es porque empiezan a ver que tienen un rival de peso político, cuando están viendo que una persona está subiendo, está trabajando, y cuando sienten que puede proyectarse como una figura mucho más fuerte de la que es, cuando uno se registra para un cargo tan importante como es dirigencia de un partido, lo primero que en un momento dado le piden la solvencia moral, y aquí se cumplió con todos los requisitos, se prepara uno para llegar y obviamente es lo que ha hecho Alejandro Moreno”.
“Es un ataque político y que ustedes lo pueden ir viendo, cada vez que una persona destaque por su trabajo y trayectoria siempre va a ser objeto de ataques”, afirmó.
Atacó a quienes acusan al exmandatario campechano, “el mismo Alejandro Moreno ha manifestado que no solamente distorsionan sino confunden, y precisamente lo ha dejado él muy claro, está abierto a la investigación y los datos que tenga que aportar para efecto de cumplir con todo este tema y aclararlo como lo que es”.
Sobre si el Congreso del Estado podría iniciar también una investigación de cómo dejó a Campeche, dejó en claro que ese no es su interés. “No tenemos una injerencia directa porque a fin de cuentas quien está informando a fin de cuentas es la Fiscalía”.
Espurio lo alaba
Sabiendo que en gran medida es a Moreno Cárdenas a quien le debe su imposición fraudulenta en la Alcaldía de Carmen, Oscar Rosas evadió el tema y evidentemente incómodo cortó la entrevista, además de defenderlo.
“Creo que ya en su momento ya entregará cuentas si así lo están requiriendo, yo lo que sí quiero significar es el gran apoyo que dio a este gran municipio, a toda la Península, el haber concluido el Puente de La Unidad, y eso ni los carmelitas ni todos los campechanos, los que vivimos en el Sureste, lo debemos de olvidar, un Gobernador que en campaña prometió hacer el Puente de La Unidad nuevo y hoy es una realidad”, dijo.
Cabe apuntar que su abrupta entrevista tuvo tintes de lo que en realidad representa el ejercicio público para él, pues atendió a la prensa local desde su pedestal y cortante, ya que era “su gran día”.
Gobernador pretende deslindarse
Finalmente, el que sí pareció pintar su raya fue el Gobernador sustituto Carlos Miguel Aysa González, quien también dejó entrever que es revanchismo político, pero afirmó que él no está interesado en los colores partidistas, con lo que pareció distanciarse de la mala imagen del PRI y su dirigente nacional acusado de corrupto.
“Yo le voy a decir algo, está en manos de, es una situación política, por qué me refiero, porque en una contienda electoral de un partido político hay uno de los que aspira que lo denuncia para quererlo descalificar, pero yo creo que ahí está, yo creo que va a salir adelante, ya está en la Fiscalía ahí van a determinar, yo creo que ellos no van a tener ningún sesgo político, van a actuar y va a salir muy bien Alejandro”, expresó.
A la pregunta de si esto fractura a su partido, por ser un propio priista quien hizo la denuncia, señaló: “No está fracturado el partido, el partido está renovándose, y le quiero decir, yo estoy un poco al margen del partido, porque quiero ser un Gobernador sin colores sin partidos y trabajar”.
(Texto y fotos: Carlos Valdemar)