La suspensión de toda actividad que genere concentración masiva ha provocado una caída económica drástica, hasta la entrada del Semáforo Epidemiológico en color Verde son muy pocas y contadas las actividades que se pueden realizar, en ocasiones se logra un pequeño contrato pero con un tiempo limitado, esta situación se replica para los que se dedican al ámbito musical ya que todavía no se permiten fiestas.
Desempleados
Prestadores de servicios musicales como Edwin Ku, Franklin Naal Puc, Feliciano Balam Chi y José Cih Uc, señalaron que en estas fechas esperan tener más contratos ya que la puesta en Semáforo Verde ha permitido tener uno o dos contratos que dudosamente aceptan debido a que las autoridades aún no han tomado en cuenta la necesidad que atraviesan cada uno de los que se encuentran en este ámbito.
Coincidieron en que fueron suspendidos los tradicionales novenarios que duran un mes en la cabecera municipal y eso les permitía tener algunos ingresos económicos por prestar los servicios musicales, donde muchas familias dependían de estos eventos para obtener el sustento económico o para complementarlo.
Pero en la entidad continúa la cancelación de este tipo de festividades, también las actividades y ferias tradicionales de cada una de las comunidades, pues en la zona norte del estado se acostumbra a realizar diferentes celebraciones religiosas que permiten llevar a cabo actividades musicales, donde la misma ciudadanía colabora para poder realizar las populares tardeadas o los bailes tradicionales, pero en este año las que se van a realizar son a puertas cerradas y no contratan a los músicos regionales.
Hay que reconocer que durante las semanas de estar en el Semáforo Verde ha permitido que una u otra familia haga una reunión familiar y en ocasiones solicitan el servicio mínimo de algún grupo musical o simplemente el equipo de sonido para ambientar el festejo; sin embargo, pero esto prácticamente resulta insuficiente y las pérdidas económicas son considerables, ellos no alcanzan a contabilizar las pérdidas por la inactividad originada por la contingencia sanitaria del COVID-19.
Por ello esperan que en este mes decembrino las autoridades sanitarias otorguen un poco más de libertad para llevar a cabo alguna actividad musical, la cual permita empezar a reactivar la economía de las familias que dependen de este ámbito, ya que otros comercios y negocios reactivan su economía pero el ámbito musical todavía es uno de los más perjudicados.
Por Jorge Aké