A pesar de que el tanque elevado de agua que se encuentra en el rastro municipal tiene un deterioro de más de un 80%, desde hace más de cinco años las autoridades municipales en turno a quienes se les ha solicitado la demolición han ignorado la petición, pese a que urge la destrucción de la estructura que se encuentra fuera de funciones para prevenir alguna tragedia, señaló el secretario general del Sindicato de Matarifes, Primo Salazar Góngora.
Indicó que como dirigente de esta agrupación y sobre todo porque en el matadero laboran personas de este gremio, así como del Ayuntamiento, desde hace cinco años ha solicitado de manera reiterada a las autoridades municipales en turno que la estructura del tanque elevado el cual presenta significativos sea demolida porque podría desplomarse y traer como consecuencia algún accidente trágico.
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Añadió que ese tanque tiene muchos años de estar fuera de funcionamiento y lo que se observa es una estructura que tiene muchos años de abandono, ese tanque presenta signos de desmoronamiento y fractura en toda la estructura y de un momento a otro puede colapsar, sobre todo si se presentan lluvias intensas con fuertes vientos.
“Eso es algo que preocupa a los trabajadores del rastro municipal que pertenecen al sindicato y ayuntamiento, e incluso para el administrador de este inmueble porque la oficina administrativa del matadero se encuentra en la parte baja de tanque elevado y representa un riesgo para su integridad”, apuntó.
Mencionó que la dirigencia del sindicato de matarifes ha sido insistente a las autoridades municipales para que esa construcción se demuela, sin embargo, no han tenido una respuesta favorable, e incluso solo ha quedado en palabras de que se ha tomado en cuenta para su destrucción.
“Quizás porque la demolición de esa estructura tiene un costo, el cual desconocemos nosotros los carniceros, porque se tendría que traer equipos como, grúas u otras herramientas seguras para tirar por partes el tanque elevado sin causar algún accidente, ya que no es cuestión de agarrar un mazo y demolerlo por la altura que tiene, de tal modo que para derribar ese objetivo se requiere de equipo y técnica”, aseguró Salazar Góngora.
Con información de Fernando Kantún