La falta de alcohol en personas dependientes puede traer consecuencias a su salud, confirmó el secretario técnico del Consejo Estatal contra las Adicciones (CECA), Gilberto César García Salazar, quien sin embargo señaló que no se tiene registro estadístico de cuántas personas podrían estar padeciendo síntomas de abstinencia debido a que la atención en la institución fue suspendida ante la contingencia sanitaria.
García Salazar señaló que el nivel de daño por no consumir alcohol puede depender de la bebida a la que el paciente sea adicto, pero en casos graves las personas pueden consultar en el Hospital Psiquiátrico, donde pueden recibir atención médica y ser internados, toda vez que el CECA se mantiene sin funciones ante la contingencia.
El grueso de la población tiene sintomatología leve e incluso aquellos que puedan ser dependientes compraron sus botellas antes de que se decretara la Ley Seca y con beber un vaso podrían reducir los síntomas de abstinencia que se genere durante la abstinencia, expuso.
Aclaró que también, quienes consultan en hospitales privados por cuestiones de confidencialidad, no se proporcionan los datos a las instituciones públicas de salud, por lo que tampoco se puede hacer una proyección estadística del porcentaje de población que pueda ser dependiente de las bebidas alcohólicas.
1.7 % dependen del alcohol
Con base en la Encuesta Nacional sobre las Adicciones, que se registró en el 2017, se sabe que el 1.7 por ciento de la población tiene una dependencia al alcohol, por lo que es el porcentaje que también se estima para Campeche. Y de este porcentaje, quizás un 70 por ciento abuse de las bebidas etílicas.
El especialista señaló que es un rubro muy bajo el de las personas que requieren de atención especializada para su tratamiento en caso de requerirlo por su sintomatología aguda, pero sostuvo que no se puede estimar un número de campechanos con síntomas graves de alcoholismo.
Por edades, el primer lugar en consumo se registra entre quienes tienen de 24 a 44 años; les siguen los jóvenes de 18 a 24 años y, posteriormente, los adolescentes, aunque en los últimos ocho años se registra un incremento en la ingestión de alcohol de las mujeres, acotó.
En el caso de estupefacientes, añadió que el porcentaje nacional es de 0.6 por ciento, mientras que en el Estado es de 0.4 por ciento, por lo que nos encontramos por debajo de la media nacional y tampoco es un síntoma que represente un aumento en la atención médica.
De los centros de internamiento, aclaró que de los 10 que aparecen registrados, sólo dos cuentan con los requisitos para su operación, por lo que deben tener entre 10 a 30 internos y se les denomina de Ayuda Mutua.
Sin registros por contingencia
La sintomatología de abstinencia por no consumir bebidas alcohólicas ante el decreto de la Ley Seca pudo haberse elevado, pero el CECA no tiene registro estadístico debido a la suspensión de la atención a personas frente a la pandemia de Covid-19, aceptó el secretario técnico de la institución, Gilberto César García Salazar.
De hecho, dio a conocer, de los ocho pacientes que estaban recibiendo atención se retiró a cinco para que pasaran la cuarentena en su vivienda, como un permiso terapéutico, ya que por las condiciones sanitarias era mejor que estuvieran en confinamiento en sus domicilios.
Hasta el momento sólo permanecen en el albergue tres menores, dos mujeres de 13 y 15 años y un varón de 14 años.
Debido a que se suspendió el servicio de consultas, no existe un registro de posibles aumentos de síntomas de abstinencia de alcohol, como ansiedad, angustia, temblores o aspectos ligados al abuso de bebidas etílicas.
(Wilbert Casanova Villamonte)