"Productores de granos y hortalizas de la comunidad arriesgan sus patrimonios para hacer producir la tierra, tienen que reunir recursos propios para preparar suelos y la compra de insumos ya que los apoyos del gobierno se han ido retirando, por lo que hay superficie que se queda sin sembrar ante los altos costos de operación”, coincidieron el comisario ejidal Lázaro Pech Tzec y el representante del Pozo 3, Roberto Vidal Dzul Cauich.
Pech Tzec señaló que en esta ocasión recibieron apoyo por parte de los gobiernos estatal y municipal del 50 por ciento del costo del bulto de fertilizante y el nutriente fue muy limitado, ya que los ejidatarios podían tener cinco bultos, los comuneros tres y las mujeres dos bultos.
Dijo que a raíz del paso de la tormenta tropical “Cristóbal” se afectaron 50 hectáreas de chihua y a pesar de que se difundió que los productores iban a recibir apoyo, lo cierto es que a Ich Ek no le llegó nada, es más del programa estatal de ayuda con semilla, nunca se enteró cómo fue la distribución porque no fue avisado a pesar de ser comisario ejidal.
Destaca que Ich Ek es una comunidad que se distingue por el trabajo agrícola al sembrar alrededor de 3 mil hectáreas de maíz, 50 de chile habanero y 60 de tomate, en el caso de quienes cultivan la chihua luego de retirar la calabaza, siembran pepino o calabacita dzolita muy apreciadas por su sabor.
Por su parte, Dzul Cauich sostuvo que “trabajar las hortalizas es de alto riesgo pero en la comunidad hay gente que conoce del cultivo de tomate y chile habanero, aunque son pocos los que siembran por la falta de recursos, la situación se complica porque la inversión es alta y muy difícilmente se puede comprar un seguro comercial.
“Por lo tanto los horticultores están expuestos a las condiciones del clima y a la oferta y demanda del producto por lo que es necesario apoyar a quienes hacen el esfuerzo de hacer producir la tierra ya que con el paso de los años los apoyos han ido desapareciendo”, planteó.
Por Jorge Uc