Por segundo día consecutivo, pescadores de altura del sector social protestaron en las afueras del Palacio de Gobierno y en las oficinas de la Secretaría de Bienestar en demanda de contar con algún tipo de respaldo ante la difícil situación en la que se encuentran, y que hasta ayer no tenían respuesta de ninguna autoridad.
Justificaron su protesta, por la desesperación de no recibir respuesta de algún tipo de apoyo económico de ninguna de las autoridades, luego de cuatro meses sin laborar.
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Indicaron que el lunes pasado se reunieron con la delegada de los Programas de Bienestar, Katia Meave Ferniza, quién les planteó que se necesita tiempo para exponer sus planteamientos y que les resuelvan sus peticiones, por lo que decidieron instalarse su protesta afuera del inmueble hasta obtener respuesta.
Antes, acudieron a la sede del Poder Ejecutivo del Estado, en los bajos del Palacio de Gobierno, donde pidieron una audiencia con el gobernador, Carlos Miguel Aysa González para que sea intermediario ante la Federación.
El representante interino de la Federación de Sociedades Cooperativas Pesqueras del puerto de Campeche, Ángel Castillo Novelo, planteó que se encuentran en el abandono por las autoridades federales, ya que la petición de un Plan Emergente para que se les ayude no tuvo una respuesta favorable.
Manifestó que ante las condiciones de los armadores quienes no otorgan anticipos ni préstamos para que puedan sobrevivir luego de 4 meses de no trabajar y un mes que se alarga la veda, esperaban que en las delegaciones recibieran una atención positiva.
Dijo que los apoyos del programa Bienpesca por 7,200 pesos no da para vivir todo el año, aunado a que solo el 50 por ciento de los camaroneros lo recibió y el 40 por ciento restante aún no lo recibe.
Reconocen que el Gobierno no tiene por qué mantenerlos, pero en ningún momento solicitan que les regalen el dinero sin que sea devolutivo, sería un préstamo que lo reintegrarán cuando comiencen a trabajar.
También es necesario que la actividad sea competitiva para que los ingresos sean más altos, para ello se requiere que disminuyan los precios del combustible, del diésel marino, para que los patrones puedan avituallar, las embarcaciones y salgan a pescar.
Estimó que son 500 pescadores más los 140 trabajadores del sector como carpinteros, mecánicos, soldadores, electricistas entre otros, quienes demandan este apoyo, además de quienes descabezan el crustáceo.
Posteriormente en el edificio del Palacio Federal, donde se ubican las oficinas de la Secretaría de Bienestar se instalaron en plantón en espera de una respuesta positiva.
La directiva de la Federación, Roger Barrera Reyes, no tienen tiempo para esperar, ya que no tienen dinero para solventar los gastos de la familia si no laboran, por ello se dijeron desesperados y tomaron la decisión de plantarse en este inmueble hasta obtener respuesta positiva.
Por Wilbert Casanova Villamonte