El presidente de la Unión de Pescadores Ribereños de la Península de Atasta “Lomas de Román”, Leonardo Hernández Domínguez, señaló que la pesca ribereña ya no es redituable en estos tiempos debido a la presencia de tormentas tropicales en el Golfo de México, la baja producción, el alto costo de la gasolina y la falta de programas de gobierno federal.
Expresó que cuando salen a la pesca algunos de sus compañeros capturan uno o cinco robalos, otros sólo dos jureles o tres chopas, pero como no hay otra actividad que se genere en la Península no tienen otra opción que arriesgarse; pero el problema es que se endeudan con la gasolina porque en cada salida a la pesca una lancha consume entre 40, 50 ó 70 litros de combustible, cuyo costo equivale entre mil 200 a mil 400 pesos y cuando la pesca es regular el recurso que obtienen es para pagar la gasolina que se debe.
Señaló que el precio del robalo que estaba a 130 pesos se desplomó a 70 y el robalete de 100 pesos el kilo bajo 50, porque los intermediarios aducen que no hay mercado comercial; cuando el pescador logra una captura de 30 kilos de robalo representa pérdidas económicas, ya que solo obtienen un poco de recurso para pagar la deuda del combustible.
“Los pescadores ribereños no tenemos otras opciones laborales en la Península, pues los trabajos en la Planta de Nitrógeno lo tienen manipulados los sindicatos y a nosotros ni caso nos hacen porque ellos ya tienen a su personal; además, con la situación económica no hay programas de gobierno, el gobernador del estado hace lo posible pero resulta insuficiente para beneficiar a todo el sector”: mencionó.
Abundó que cuando un pescador sale y logra traer 200 pesos, lo utilizan para el azúcar, frijol, arroz, pues esa cantidad no alcanza para que la familia compre lo que se necesita, y las que tienen alguna gallina criando en el patio con eso se apoyan, pero a veces se requiere comprar medicamentos y es triste cuando no hay dinero para ello.
“Me preocupa la situación y veo que las cosas se ponen más difíciles para el sector pesquero ribereño, por ello, es urgente que el gobierno federal analice la situación que existe porque los siete mil 200 que recibimos de Bienpesca no alcanza para sufragar las necesidades de los pescadores durante un año”: enfatizó.
Agregó que los legisladores federales tanto Diputados como Senadores deben alzar la voz a favor del sector para que salgan programas que ayuden a los ribereños porque hasta los programas de Petróleos Mexicanos (Pemex) se encuentran paralizados y esto nos deja en un estado de indefensión.
Con información de Fernando Kantún